La universidad londinense King’s College de Londres ha llevado a cabo un estudio, publicado en la revista The Lancet, para medir la estadística de los casos en los que los niños y adolescentes hasta los diecisiete años sufren síntomas persistentes cuando se contagian del Covid-19.

El estudio recogió los contagios que se produjeron en los niños y adolescentes británicos menores de diecisiete años desde el principio de la crisis sanitaria hasta el pasado febrero, y los resultados reflejan que ni siquiera uno de cada veinte niños tenía síntomas tras cuatro semanas del contagio y que prácticamente la totalidad de los niños estaban totalmente curados a las ocho semanas de haberse contagiado.

La investigación, además, demostró que los niños sufren síntomas de covid durante cinco días de media, si tienen entre cinco y once años, y durante siete días en los preadolescentes y adolescentes de doce a diecisiete años.

Finalmente, las estadísticas mostraron que solo uno de cada cincuenta niños tiene síntomas dos meses después de contagiarse, pero que, en todo caso, son niños que ya tienen algún problema de salud previos.

No obstante, es importante recordar que estos datos no implican que los niños no deban cuidar las medidas de seguridad para impedir contraer el virus, ya que pueden ser transmisores y, a pesar de que las probabilidades sean menores que en los adultos, también pueden sufrir síntomas a largo plazo.