La figura de la enfermera escolar ha sido reclamada curso tras curso desde diferentes frentes, tanto desde el sector educativo como del sanitario. El Consejo de Enfermería de la Comunitat Valenciana (Cecova) y el sindicato Satse, así como el STEPV y CSIF en Educación, entre otros, reiteran periódicamente esta petición; una reclamación a la que también se suman las familias de la Confederación de Ampa Gonzalo Anaya y la Federación Católica de Padres de Alumnos de València (Fcapa), que ven adecuada la implantación de la enfermera escolar, más aún en pandemia. En líneas generales, todas las partes consideran que los docentes no deberían asumir la carga ni responsabilidad de tareas como la administración de medicación.
Con esto, el último año algunos consistorios (como los de Benicàssim, Segorbe, Peñíscola y Onda) quisieron contratar personal sanitario con fondos de las arcas municipales, algo que Educación tampoco vio con buenos ojos, puesto que es quien debería autorizar la entrada a los centros de este personal ajeno al ámbito educativo.
Por su parte, el Consell apuesta más por estrechar la comunicación y el contacto entre los colegios e institutos y sus centros de salud de referencia. Cabe recordar que, hace un año, el presidente Ximo Puig y el conseller Vicent Marzà explicaron que, en el caso de que el Consell pudiera y se planteara la contratación de las casi 2.000 enfermeras que serían necesarias, este refuerzo se destinaría a los hospitales, no a los colegios e institutos.
