Un estudio del Instituto de Investigación Sanitaria Incliva del Hospital Clínico de València, en el que han participado un total de 313 infectados por coronavirus, muestra que casi la mitad de los pacientes con neumonía moderada o severa causada por la covid-19 presenta alteración de la difusión pulmonar seis meses después de recibir el alta hospitalaria. El resultado de la investigación también revela que un 22 por ciento de los enfermos más graves pueden presentar alteraciones fibróticas pulmonares en la tomografía computarizada (TC) y un «aumento de los biomarcadores séricos relacionados con la fibrosis pulmonar».

La alteración en la difusión pulmonar implica que el oxígeno que hay en el interior de los alveolos pasa con mayor dificultad al interior de los vasos sanguíneos, para ser transportado a cualquier parte del organismo, lo que da lugar a que muchos pacientes noten disnea (sensación de falta de aire), sobre todo a la hora de hacer algún esfuerzo o ejercicio físico moderado. Los cambios fibróticos pulmonares iniciales son alteraciones muy sutiles (pequeñas cicatrices), visibles en la TAC torácica de alta resolución, con escasa repercusión clínica inicial, aunque no se tiene la seguridad de si esos cambios progresarán o no.

En cualquier caso, las conclusiones del estudio aconsejan, según los investigadores, la realización de un seguimiento tras el alta hospitalaria de los pacientes ingresados por neumonía causada por covid-19 que incluya, además de la historia clínica y exploración física, unas pruebas funcionales respiratorias junto con radiografía de tórax cuando persisten síntomas como cansancio, fatiga o sensación de falta de aire.

La investigación «Cambios en los test de función pulmonar en pacientes con neumonía por SARS-CoV-2» ha sido liderada por el doctor Jaime Signes-Costa, coordinador del Grupo de Investigación en Enfermedades Respiratorias de Incliva y jefe de Neumología del Hospital Clínico. Su principal objetivo era conocer, de forma precoz, el porcentaje de pacientes que pueden presentar alteraciones funcionales respiratorias a corto y medio plazo tras una neumonía por coronavirus, así como la severidad de dichos cambios.

Los resultados de este estudio de cohortes multicéntrico, prospectivo y observacional, que se inició en mayo 2020 y finalizó en junio de 2021, acaban de publicarse en Archivos de Bronconeumología, en el artículo titulado «Lung Function, Radiological Findings and Biomarkers of Fibrogenesis in a Cohort of Covid-19 Patients Six Months After Hospital Discharge».

La mayoría de las infecciones virales respiratorias no suelen dejar secuelas pulmonares en forma de cambios fibróticos en el tejido pulmonar. Sin embargo, tras la epidemia del síndrome agudo respiratorio severo (SARS) en 2003, causado por la infección por el coronavirus SARS-CoV-2, se observó que los pacientes que sobrevivieron desarrollaron diferentes grados de fibrosis pulmonar residual, presentes en pruebas de imagen, como TAC torácica de alta resolución, y confirmado con test de función pulmonar. Siguiendo esta experiencia previa, la hipótesis de la que partía el actual proyecto es que alrededor de un tercio de los pacientes que ingresan por neumonía covid-19 podrían presentar, después del alta hospitalaria, alteraciones fibróticas pulmonares.

Estudio con 313 enfermos

En el estudio del Incliva se incluyeron 481 pacientes adultos ingresados por neumonía por SARS-CoV-2 entre el 1 de mayo y el 31 de julio de 2020, pero finalmente, ante la situación de pandemia, solo pudieron ser analizados 313 enfermos, a quienes se realizó un seguimiento a los 2 y 6 meses tras el alta hospitalaria. Se les hicieron pruebas de función pulmonar, detección de biomarcadores de fibrogénesis en plasma circulante, radiografía de tórax y TAC torácica de alta resolución, para analizar su evolución y relacionar los cambios fibróticos con variables demográficas, clínicas y biológicas. Algunos de los marcadores de fibrogénesis (MMP1, MMP7 y periostina) y la edad se relacionaron con la severidad del cuadro clínico y con cambios fibróticos en la TAC de tórax.

En la investigación clínica, que tuvo una inversión de 73.500 euros del Instituto de Salud Carlos III de la convocatoria especial, de mayo de 2020, participaron los servicios de Neumología de doce hospitales españoles, de los que ocho son valencianos: Hospital Clínico, General, Doctor Peset y Arnau de Vilanova, en València; Hospital de la Ribera, en Alzira; San Juan de Alicante, y el del Vinalopó; y el General de Castelló.