Hay heridas que tardan mucho en cicatrizar y algunas nunca acaban de hacerlo. El Ayuntamiento de València se ha propuesto ayudar para mitigar el dolor de quienes todavía no han podido enterrar a alguno de los más de 250 represaliados fusilados que yacen en la «Fossa de la Terra», la 126, en el cementerio de Paterna. Desde el gobierno municipal y la Associació Familiars Víctimes del Franquisme de la FossaComuna 126 de Paterna se ha puesto en marcha una iniciativa para localizar a los familiares de 36 de estos valencianos que por permanecer fieles a la República acabaron en la que considera la mayor fosa común de la Comunitat Valenciana.

Es una fosa muy reconocida en el camposanto de Paterna, muy cerca de la entrada a la izquierda, ya que en ella se colocaron ladrillos para identificar las sacas con todos los ejecutados por el franquismo, ya que constaba el nombre, su profesión y la fecha del fusilamiento. Entre las víctimas había un amplio espectro de trabajadores y edades. Desde ebanistas, hasta topógrafos, pasando por amas de casa, mecánicos, tapiceros, mecánicos, picapedreros, chóferes y hasta tapiceros. Todos ellos, con edades comprendidas entre los 22 y los 58 años. Todos ellos fueron asesinados en cuatro días diferentes: el 27 y 29 de agosto y el 11, 12 y 14 de septiembre de 1940. Las más de 250 víctimas están enterradas en cinco sacas distintas y conforman el mayor enterramiento de estas características de la Comunitat Valenciana.

Desde el ayuntamiento y la asociación de familiares se pretende ahora identificar a los descendientes de las víctimas. Para ello, han publicado un listado con los nombre y apellidos, así como su oficio, de los represaliados y una dirección de correo electrónico a la que poder dirigirse. El objetivo de esta iniciativa es lograr identificar los restos hallados en la fosa. Una vez identificados los familiares de cada víctima, se realizarán las pruebas de ADN para poder cotejarlo con los huesos hallados. Posteriormente, cada familia decidirá qué hacer con los restos, si llevarlos a sus pueblos o mantenerlos en un mausoleo que se construirá.