Un "malestar" en la comunidad médica (concretamente en el Colegio de Médicos de Alicante) y una "falta de respeto" hacia la comunidad religiosa de la Iglesia Adventista de España. Estas son las valoraciones de dos colectivos que representan a las dos partes sobre la decisión de la Conselleria de Sanidad de cambiar las oposiciones de Ginecología y Obstetricia del sábado 18 de junio al domingo 19 por la religión de una de las aspirantes que, por motivos espirituales, no podía asistir al examen el sábado.

En este sentido, el Colegio de Médicos de Alicante (COMA), indica en un comunicado que "respeta los derechos individuales de cada aspirante, basados en la legislación vigente, pero nos asombra que la decisión tomada afecte a la totalidad de aspirantes, cuando existen precedentes de solución para casos como éste, adecuando la realización de la prueba exclusivamente al solicitante".

"El cambio supone un perjuicio a la asistencia de los participaciones, menosprecia su trabajo y desatiende la conciliación o el coste de asistir a las pruebas"

Así, la Junta Directiva del Colegio quiere transmitir "el malestar del colectivo médico, por el perjuicio que causa a los servicios a los que pertenecen los aspirantes el alterar las programaciones de la asistencia ya hechas, mediante decisiones tomadas por dirigentes de la conselleria que, además, menosprecian el valor de su trabajo, y desatienden aspectos personales básicos como son la conciliación familiar o los costes que supone la asistencia a estas pruebas".

Por eso, la agrupación pide al conseller de Sanidad, Miguel Mínguez, que reconsidere la resolución de la Dirección General de Recursos humanos y reestablezca la fecha fijada en un principio, "respetando la solicitud individual del aspirante".

"Una falta de sensibilidad y respeto a la libertad religiosa"

Por su parte, la Iglesia Adventista de España, de la que es miembro la aspirante afectada por la fecha inicial de los exámenes públicos, emitió un comunicado en el que "lamenta la falta de sensibilidad y de respeto a la libertad religiosa de la Conselleria de Sanidad" y opina que el cambio de fecha "podría haberse evitado de ampararse la decisión en la ley, cuya aplicación ya se ha ejecutado en otras ocasiones".

La Iglesia Adventista "no comparte la decisión de la Generalitat y nunca ha pretendido generar un perjuicio al resto de opositores"

Por eso, sentencian que la Iglesia Adventista "no comparte la decisión de la Generalitat y nunca ha pretendido generar un perjuicio al resto de opositores".

"Entendemos que el reconocimiento de la libertad religiosa no debe realizarse en perjuicio de terceros, que no son responsables del proceder de la administración", apuntan, además de decir que "trasladar a la opinión pública el mensaje de que por una opositora se modifica la fecha de otras personas, es un nuevo ataque a una institución religiosa con presencia arraigada en la Comunidad Valenciana desde hace décadas.

"Entendemos que esta resolución quiere cargar la responsabilidad de su error inicial sobre una minoría religiosa que forma parte de la FEREDE (Federación de Entidades Religiosas Evangélicas de España) y de los Acuerdos firmados con el Estado en el año 1992".

Cambio de fecha "incomprensible, temerario y negligente"

El Sindicato Médico CESM-CV ha pedido en los juzgados que se adopten "medidas cautelarísimas" para mantener la fecha inicial de la oposición atrasada. El letrado del sindicato, Guillermo Llago, en representación de varios opositores, ha confirmado a EFE la presentación del escrito este lunes ante la sala de lo contencioso-administrativo del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana, y ha considerado "no solo incomprensible, sino realmente temerario e incluso negligente" el cambio de fecha.

Para el letrado del CESM-CV, esta decisión perjudica a todas aquellas personas que también se presentan a esta oposición, unas 400, y que en algunos casos han reservado hoteles o transporte a València, han cambiado una guardia médica o tienen viajes personales al extranjero. Señala que en el caso anterior, cuando en mayo se cambió el examen de una aspirante a oftalmología, el TSJCV adoptó una resolución que implica "el menor de los perjuicios", ya que solo afecta a los miembros del tribunal opositor que deberán alargar su jornada para que la opositora pueda hacer el examen cuando se ponga el sol.

Sin embargo, "en este caso se perjudica a todos los opositores, al tribunal y al esto de personas que trabajan para que el examen se haga en condiciones, y que con el cambio de fecha se ven obligados a cambiar los planes que tenían ya previstos para ese día".