La ayuda del asistente personal abre una nueva vía de negocio para las empresas

La figura del asistente personal cambia el paradigma en la atención y los cuidados a las personas con dependencia. Es la figura más cara del sistema y también, la más desconocida. Implica el pago de una ayuda directa a la persona con dependencia que conlleva un ingreso mensual de hasta 2.350 euros al mes. El objetivo es que la persona dependiente contrate al asistente personal que elija para realizar las funciones que necesite. Personas de entre 3 y 65 años pueden soliciltarla. Así, cuando el asistente personal es para un menor de edad la figura se denomina PATI (Persona Profesional de Asistencia Terapéutica Infantil).

La prestación del asistente personal figura en la cartera de servicios de la Ley de Dependencia. Sin embargo, hasta 2019 no se impulsó esta ayuda en la Comunitat Valenciana, autonomía pionera en esta prestación. De hecho, el ministerio reguló esta figura en mayo de 2023, 16 años después de que se aprobara la ley. Así, la Comunitat Valenciana aparece como ejemplo en la puesta en marcha de una ayuda que implica un antes y un después para quien cuenta con ella. Por ello, en la Comunitat Valenciana la ayuda pasó de 6 beneficiarios en 2018, a 375 en 2023 (con datos del mes de mayo). Y el número de solicitantes no para de crecer. De hecho, en poco más de seis meses la ayuda cuenta con casi 200 beneficiarios más hasta situarse en los 572 que resgistra el sistema en la actualidad, según datos de la Conselleria de Servicios Sociales que dirige Susana Camarero.

La figura está prevista como una ayuda directa al usuario, que es quien debe contratar al trabajador con un sueldo por horas, con vacaciones y bajas cubiertas. Así el beneficiario de la ayuda le paga a Hacienda y a la Seguridad Social por el asistente personal. La teoría es sencilla pero la práctica es compleja y las empresas ya han visto negocio en una ayuda donde en teoría, quedaban excluidas.

Así, las empresas de servicios que incluyen la prestación del asistente personal no para de crecer. De hecho, la Conselleria de Servicios Sociales proporciona un lista con 89 empresas acreditadas para prestar el servicio. Entre ellas figuran desde asociaciones de familiares de determinadas enfermedades o trastornos hasta profesionales que se han unido en una entidad para ofrecer el servicio, pasando por empresas de servicios que igual ofrecen una limpieza de ozono completa que un asistente personal.

Problemas de gestión y pago por adelantado

Y es que las familias encuentran principalmente tres problemas a la hora de tramitar la prestación del asistente personal. "La primera es que, a la hora de solicitar la ayuda, debes poner con nombres y apellidos a quién vas a contratar. Y muchas veces no hay un nombre que dar porque lo que se quiere es tramitar la prestaicón mientras se busca a la persona adecuada. Por eso, muchas veces las familias recurren a las empresas porque así se pone el nombre de la empresa y se agiliza el trámite", explican desde distintas plataformas en defensa de la ley de Dependencia y asociaciones de familiares de enfermos.

El segundo problema "son los trámites de realizar un contrato, asegurar los pagos a Hacienda y a la Seguridad Social. Es algo desconocido para las familias pero es el día a día de las empresas. Dar de alta, de baja... Ellos están acostumbrados y nosotros tenemos hasta problemas para pedir cita previa en la Seguridad Social", añaden las mismas fuentes.

El tercero hace referencia al pago por adelantado que deben hacer las familias entre que la Generalitat Valenciana aprueba la ayuda y se cobra la prestación. "Siempre hay un impás de tiempo entre que la conselleria comunica que la ayuda está concedida y llega el dinero. Hablamos de meses. Y aunque se cobran los atrasos hay que hacer frente a ese dinero. Es decir, cuando la conselleria autoriza la ayuda tú debes contratar al asistente personal, que empieza a trabajar. Pero la ayuda aún no ha llegado. Cuando llegue, pagarán los atrasos pero hay que adelantar esos 2.000 euros al mes. ¿Qué familia puede hacer frente a eso? Las empresas se hacen cargo y eso es un punto importante porque lo contrario implica tener que pedir un crédito personal. Hay muchas familias endeudadas por este motivo", explican desde la Coordinadora de Plataformas en Dependencia de la Comunitat Valenciana.

Un negocio en auge

Así, las empresas han visto negocio en la tramitación de la ayuda del asistente personal, una prestació que cada día tiene más solicitudes y beneficiarios. En 2012, una mujer pidió por primera vez esta ayuda en la Comunitat Valenciana. Tres años después eran cuatro las personas que contaban con esta prestación. En 2022 fueron 277 y ahora hay 572. En 2022 la figura del asistente personal se reguló en la Comunitat Valenciana de forma oficial, incluido la PATI, una de las ayudas más solicitadas por la infancia con discapacidad. De hecho, de los 572 beneficiarios del aistente personal que hay en la actualidad, 383 son menores de edad. Ahora bien, las personas mayores no pueden solicitar esa ayuda, lo que generó críticas ya que el decreto valenciano establece un tope de edad de 65 años.

La norma recoge que la asistencia personal debe "facilitar al beneficiario en el acceso a la educación y al trabajo, así como a una vida más autónoma en el ejercicio de las actividades básicas de la vida diaria". Sin embargo, conseguir que el asistente personal infantil entrara en las aulas también supuso un logro y un cambio en las directrices del personal no docente en los centros educativos. Fue en 2020 y supuso un antes y un después para numerosas familias.