Salvador Navarro: "El corredor mediterráneo nos posicionará como un punto estratégico de fabricación"

El presidente de la CEV pide agilidad burocrática y una ejecución efectiva en una infraestructura que beneficiará a empresas y ciudadanía

Salvador Navarro, presidente de la CEV.

Salvador Navarro, presidente de la CEV. / Francisco Calabuig

Juanma Vázquez

Juanma Vázquez

Llevamos décadas reclamando la necesidad del corredor mediterráneo. ¿Estamos ya ante el momento decisivo?

A ver, hay que reconocer el impulso que ha hecho el Gobierno en estos dos últimos años y entender que la ejecución de este tipo de infraestructuras es lenta. A fecha de hoy está prevista la interconexión entre Elx, Alicante, València, Castelló... que es fundamental no solo para mercancías, sino para la sociedad valenciana. A la vez, esta obra rompe el sistema radial que hay en este país y muestra una lógica, y es que el porcentaje del PIB y el porcentaje de población del arco mediterráneo es superior a lo que puede ser el eje central. Eso es lo positivo. Lo lamentable es que hoy sigamos con problemas de acceso a uno de nuestros principales clientes, que es Cataluña. No es lógico que la segunda y la tercera ciudad de este país no estén debidamente conectadas. Por eso pedimos agilidad en los trámites burocráticos y que luego la ejecución sea efectiva.

¿Qué cree que ha cambiado para que ese paso adelante en el corredor se esté dando hasta ahora?

Que hoy todo el mundo se ha concienciado. El gobierno actual, con la presión que ha hecho la sociedad y los empresarios, ha reaccionado y ahora pedimos que esa agilización sea mucho más efectiva. Porque cada pérdida de tiempo es lamentablemente una pérdida de competitividad del país.

Habla de acelerar esas infraestructuras. ¿Cómo de esencial es esa colaboración público-privada para que esto se haga rápido?

Esta es una de las partes que a los distintos gobiernos les cuesta, les da miedo. Pero en esa colaboración, la parte privada es fundamental por cuestiones de economía, de agilidad y desde luego por la capacidad que tienen las empresas de resolver mucho más efectivamente que la Administración. Hay muchísimos casos en el que ese modelo público-privado está funcionando muy bien. No tenemos por qué tener miedo una de las partes de la otra.

Salvador Navarro, presidente de la CEV.

Salvador Navarro, presidente de la CEV. / Francisco Calabuig

La logística será uno de los sectores que más se beneficiará con el corredor. ¿Dónde cree que puede posicionar a la Comunitat?

Muy claramente, como un punto estratégico de fabricación. Ya somos un punto estratégico como demuestra el puerto de Valencia, que es el número uno del Mediterráneo y el cuarto de Europa, con un tejido empresarial que apoya y exporta. Por tanto, partiendo de que España está a la cola de Europa, necesitamos unas conexiones aéreas, marítimas y, desde luego, ferroviarias adecuadas para nuestra competitividad. 

Y atraer con ello más inversiones.

Sí, esa situación nos coloca como un país y una comunidad de entrada para inversiones estratégicas que pueden ser muy interesantes desde el punto de vista de fabricación. En muchas ocasiones hablamos de reindustrialización, de inversiones y las infraestructuras al final son elementos de competitividad no solo para las empresas, sino para los territorios también. Y digo otra cosa. La infraestructura en un momento determinado estará y queremos que Renfe empiece a dar pasos atrás y que sean los operadores logísticos los que empiecen a trabajar en un sistema logístico para que en mercancías podamos ser competitivos.

Ser más competitivos

Ha hecho varias referencias a la competitividad. ¿Se puede contabilizar el beneficio en esta área que generará el corredor?

No está calculado. Pero si tú tienes una infraestructura a tu disposición, vas a hacer uso de ella y te va a ayudar a ser más competitivo que otros territorios y empresas. Por eso es importante esa conexión, por ejemplo, con Almería y Murcia, que junto a la Vega Baja son la huerta de Europa. Necesitamos conectividad, frecuencia y elementos para que esos productos lleguen a tiempo y en calidad a Europa. Y no solo eso. Cuando yo digo que tenemos posibilidad de que otras empresas inviertan en la Comunitat Valenciana, me refiero a nuestra apuesta, conjuntamente con los sindicatos y la Administración, de transformar el tejido productivo. Queremos que las empresas sean más grandes, que innoven más, que sean industriales.

Salvador Navarro, presidente de la CEV.

Salvador Navarro, presidente de la CEV. / Francisco Calabuig

En el caso de Cataluña y de Barcelona, ¿esa mejora de infraestructuras considera que sería el punto más positivo?

Hay tres zonas y cada una diferente. Con la zona centro tenemos una magnífica conexión y tenemos un cliente de referencia como son las empresas de Madrid. Tenemos otra que desde el punto de vista logístico también es muy beneficioso, que es la conexión de Zaragoza. Lo que es el corredor cantábrico y conectar los puertos del este con el puerto de referencia, que es el de Bilbao, que además son complementarios. Y luego nuestra conexión con Cataluña. Barcelona es la puerta de salida y de entrada a Europa desde España. En esas tres visiones estamos muy bien posicionados para interrelacionarnos.

Intermodalidad y puntos de recarga

La intermodalidad coge fuerza como vía para reducir emisiones y agilizar viajes. ¿Cree que el consumidor está concienciado para dejar de lado más su coche?

Eso es una decisión personal, pero voy a poner mi caso. Antes para ir a Madrid usaba muchísimo el coche. Pero desde en el momento en que ya hay una alta velocidad, el coche prácticamente dejas de usarlo por seguridad primero y luego por comodidad. En el caso de Cataluña, hoy esto es imposible, pero es verdad que el usuario si tiene una frecuencia y ese servicio, como es el caso de Madrid, va a utilizarlo.

Si se habla de movilidad y de futuro hay que hablar de la infraestructura de puntos de recarga para coches eléctricos. ¿Cree que mejoramos en ello a ritmo suficiente?

Aún nos queda camino. Los ayuntamientos, por ejemplo, han hecho inversiones de puntos eléctricos, pero con muy baja potencia, con lo cual eso sirve poco. Cada vez más tenemos que tener claro que los combustibles fósiles se acaban y son contaminantes y tenemos que ir a una transición. Creo que la Administración tiene que hacer una apuesta mayor, como el caso de Portugal, que ha hecho claramente esa apuesta de cambio de tecnología y cuidado del medio ambiente, que es importante.