Desde principios de enero Llíria cuenta con el nuevo juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 7. Este tribunalcomplementa a las salas de un juzgado cuyos empleados están sometidos a unas condiciones laborales que no cumplen las mínimas de seguridad y salud en los lugares de empleo por la alta carga de trabajo según llevan denunciando los sindicatos desde 2014.

Sin embargo, la apertura de este nuevo juzgado -que cuenta con siete nuevos funcionarios pero sin ninguna novedad en lo referente a jueces titulares- no ha dejado contenta a Esquerra Unida (EUPV) que pidió a la Conselleria de Justicia «efectuar una evaluación específica de la carga de trabajoactual que soportan los juzgados para adoptar medidas concretas que mejoren las condiciones laborales, situación que nos parece de máxima gravedad», explicó ante el Congreso, el diputado Ricardo Sixto.

Se necesitan tres juzgados

En noviembre, EUPV planteó delante de la Mesa del Congreso preguntas sobre las condiciones laborales que sufren los empleados del juzgado de Llíria. Ante esta tesitura el Gobierno ha respondido que con la creación del nuevo juzgado número 7 se reducirá la carga de trabajo. No obstante, la formación de Sixto «tiene sus dudas respecto a que habrá una reducción de la carga», con la nueva sala.

Asimismo, EUPV quiso recalcar la implicación de los sindicatos de la Confederación Intersindical, CC.OO. y UGT. -cuyos delegados de prevención de riesgos laborales impulsaron la denuncia en 2014- que creen necesaria la creación de «tres juzgados más para la carga de trabajo que ya soportan y la solución de la falta de materiales y personal por ser los juzgados con más carga laboral en la Comunitat y los sextos de toda España». A pesar de esto, EUPV también consideró «una buena noticia» la creación del juzgado de Primera Instancia e Instrucción Nº 7 de Llíria.