Una vez conocidos los resultados de las elecciones autonómicas del 28 de abril, las expectativas de Ciudadanos en el Camp de Túria crecieron ostensiblemente. La formación naranja había superado en voto al PP y se convertía en la segunda fuerza con más sufragio de la comarca. Incluso en municipios como Bétera, Nàquera o San Antonio de Benagéber fueron el partido con más apoyo. Sin embargo, el voto en clave municipal ha sido muy diferente al emitido en clave autonómica.

Ciudadanos no solo no ha superado al PP, sino que ni siquiera ha alcanzado la mitad de respaldos que los populares. Solo 8.004 votos en el Camp de Túria por los 21.745 del PP. Es más, la formación naranja incluso ha perdido dos concejales en la comarca respecto a los comicios de 2015, al pasar de 22 ediles a 20. Los únicos aspectos positivos: la probable alcaldía de Loriguilla, la posible entrada en el gobierno de Bétera y la capacidad para decidir quién gobierna en Vilamarxant.

En el debe, la escasa penetración obtenida en algunos de los principales núcleos de la comarca como son Llíria, Riba-roja de Túria o l'Eliana, con solo un concejal en cada ayuntamiento; y su escasa proyección a nivel municipal en las localidades donde mejor resultado obtuvo en las autonómicas -Bétera, Nàquera, San Antonio de Benagéber o la Pobla de Vallbona-. Precisamente en estos cuatro municipios buena parte de su sufragio parece haber ido a parar a formaciones locales, de urbanizaciones o de nuevo cuño que no presentaban candidatura el 28A como Mas Camarena-Torre en Conill en Bétera, UPdN en Nàquera -donde ni presentó lista-, AISAB en San Antonio de Benagéber o CUPO y Contigo en la Pobla de Vallbona.

Curioso también es el caso de Gátova, donde alcanzó el poder en 2015. Su alcalde, Manolo Martínez, se fue del partido y se presentó por Contigo. Él ha vuelto a ganar. Ciudadanos no ha sacado ningún edil.