Minuto de silencio en recuerdo del pequeño Eric

La muerte del pequeño Eric, el bebé de un año presuntamente degollado por su madre en Vilamarxant, ha sumido a los vecinos del municipio en una profunda consternación, ya que por más veces que ocurra, en ninguna mente sana cabe el que un padre o una madre acabe con la vida de su hijo, en este caso un niño que apenas había cumplido la semana pasada su primer año de vida.

A las 12.00 horas la corporación municipal, con el alcalde de Vilamarxant a la cabeza, ha guardado un minuto de silencio en memoria del pequeño encontrado muerto en el trastero situado en la azotea de la casa, desde donde posteriormente la presunta infanticida, de 36 años, saltó tras coger una escalera a la terraza de la finca anexa. La mujer trató finalmente de suicidarse saltando desde una altura de cuatro pisos, aunque un vehículo que se encontraba aparcando en ese momento amortiguó el golpe.

“Desde nuestro pueblo queremos enviar un mensaje sincero y contundente de repulsa ante hechos como éste, que nos afectan a todos como sociedad”, ha remarcado el alcalde Xavier Jorge antes del minuto de silencio. En el mismo también ha querido mostrar sus condolencias a la familia del menor “que estarán padeciendo esta desgracia”.

Una mujer mata a su bebé y después intenta suicidarse en Vilamarxant

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Al emotivo minuto de silencio han acudido numerosos vecinos del municipio, pero ningún amigo y familiar próximo a la familia. Cristina S. N., que permanece ingresada en el Hospital La Fe de València con politraumatismos fruto de la caída, no era muy conocida en Vilamarxant, donde apenas hacía vida social.

Según las fuentes consultadas por este periódico, la mujer padecía una depresión posparto tras el nacimiento el 22 de febrero de 2022 de su único hijo. Algunas fuentes indican que ya había sido atendida por los servicios médicos, aunque no consta ningún expediente abierto en los Servicios Sociales, ya que se encontraba en una fase muy incipiente de una supuesta enfermedad mental. Serán los médicos forenses expertos en psiquiatría los que determinarán si en el momento del crimen sufrió algún tipo de brote y el grado de imputabilidad de la presunta asesina.

En la vivienda, situada en el número 24 de la calle Pobla de Vallbona de Vilamarxant, la Guardia Civil encontró una nota manuscrita en la que la presunta parricida dejaba constancia de sus ideas paranoides y persecutorias.