La Puríssima ilumina Ontinyent

La solemne procesión de la Puríssima fue ayer el acto central de las fiestas de Ontinyent, ciudad que profesa un acentuado fervor hacia la Inmaculada Concepción. La parte más religiosa y la cívica se fundieron en una, a través de un desfile en el que primero partieron los gegants i cabets seguidos de los bailes procesionales, para dar paso luego a la salida de la Cruz alzada. La fiesta goza este año de una especial relevancia puesto que la Generalitat ha distinguido el tres veces centenario cant dels Angelets como Bien de Relevancia Local dentro del catálogo de tradiciones valencianas que hay que preservar y potenciar.

No sólo la procesión concitó el interés de devotos y vecinos en general durante el día de ayer. Y desde muy temprano, ya que a las cinco de la mañana se celebró el XXVI Recital Interparroquial de Coros, al que siguió la misa de descubrir y el rezo del rosario de la Aurora a las siete de la mañana que continuó con la despertà. A las once de la mañana, el obispo auxiliar de Valencia Arturo Ros Murgadas concelebró la solemne misa mayor, a la que siguió un volteo general de campanas y la tradicional tronà, a la una del mediodía.

Hoy sábado los festejos continúan con el esperado sorteo de camareras para el año siguiente, que tendrá lugar después de la misa sabatina. A las seis de la tarde la iglesia de Santa María será el punto de partida del tradicional Aguinaldo de la Puríssima, en el que cantan los angelets en su recorrido por el itinerario de costumbre. La llegada de nuevo al punto de partida, la iglesia de Santa María, en torno a las ocho de la tarde servirá para tomar parte los fieles en la eucaristía del Aguinaldo, que dará paso ya a los actos de mañana domingo. A las once, solemne misa dobla a la Puríssima, tras la finalización de la cual tendrá lugar la procesión y posterior subida de la virgen a su camarín en el templo.

Los actos de los días previos

Antes de la recta final de los actos de la Puríssima, el miércoles y el jueves la festividad se centró en actos como la dansà infantil, la visita de los angelets a las residencias de la ciudad, el desfile de gegants i cabets, las vísperas solemnes o la gran dansà de la noche del jueves, víspera del día grande de ayer.