El jurado del concurso de ideas para el acondicionamiento urbano de la plaza del Ayuntamiento de Bocairent, convocado por el Área de Espacios Públicos y Naturales, avaló técnicamente el jueves, las tres propuestas presentadas ( Tissatge, Lienzo y Bekirent's Root), que ahora pasan a la fase de votación popular que se extenderá del 31 de este mes hasta el 15 de junio para determinar la opción que finalmente se ejecutará mediante el Plan SOM de la Diputación de Valencia, con una inversión final de 178.200 euros.

Antes, sin embargo, el consistorio organizará una sesión pública de presentación de las tres propuestas el próximo día 30 a las 20 horas en un acto en la sala Juan de Juanes en el que los autores de cada una las defiendan ante los vecinos. Se trata, según el alcalde de Bocairent, Josep-Vicent Ferre, «de continuar dando voz a la ciudadanía en la definición del pueblo que queremos y más en una actuación tan emblemática como la renovación de un espacio con tanta trascendencia» para los vecinos, señala el primer edil.

El jurado destacó los puntos a favor y en contra de cada propuesta y solicitó que para la exposición pública puntualicen cuestiones relativas al alumbrado, la circulación y la protección de la fuente centra. De Tissatge destacó la inclusión de mobiliario urbano, la reorganización del tráfico y la ampliación del espacio público mientras que señaló como principal debilidad la diferenciación entre la trama del tráfico y la peatonal. Respecto a Lienzo, el jurado subraya la eliminación de barreras arquitectónicas y la dotación de servicios como los aspectos más positivos. Por el contrario, la delimitación de la terraza frente al ayuntamiento penaliza la valoración. Por último, de Bekirent's Roots se valora el juego de formas geométricas y la ampliación de parte de las aceras; en cambio, la dimensión de los espacios y la excesiva zona de aparcamientos y su efecto de barrera visual restan atractivo, según apuntaron ayer fuentes del consistorio que preside Ferre.

La concejala de Turismo, Noelia Vañó, presidió el jurado, que estaba integrado por el arquitecto municipal, Pablo Vicente Martín; el ingeniero técnico municipal, Jordi Terol; el arquitecto técnico de la Mancomunitat de Municipis de la Vall d'Albaida, Vicente Sanz; el jefe de estudios de arquitectura de la Escuela Politécnica Superior de la Universidad de Alicante, Ángel Benigno González así como por Mireia Morató, representante de la Associació Veïnal del Barri Medieval, y Catalina Gómez, como presidente de la asociación de hostelería y turismo de Bocairent. La arquitecta técnica Maite Tortosa actuó como secretaria.