Ramón Vila volvió a nacer cuando el tractor con el que se disponía a efectuar tareas agrícolas en una finca de su propiedad volcó y le dejó atrapado en su interior. Los hechos ocurrieron el pasado 28 de mayo en torno a las 19 horas, en un paraje conocido como el «Linsancho», en el término municipal de Moixent.

Según explica Vila, un agricultor de 58 años de La Font de la Figuera, a Levante EMV, «había llovido y el terreno estaba muy resbaladizo». «El suelo es muy arcilloso en esta zona. Esto provocó que el tractor patinara y a continuación volcara», rememora. Sin embargo, el agricultor pudo salir por su propios medios del interior de la cabina para, a continuación, llamar él mismo a la grúa que se encargó de retirar el vehículo.

Afortunadamente, todo quedó en un susto y Ramón no precisó de atención médica. Salió completamente ileso del incidente.

Después de lo sucedido, Vila insiste en la necesidad de tener puesta la barra protectora en el tractor cada vez que se sale al campo. «Es como el cinturón de seguridad en los coches que salva vidas en caso de accidentes. A mí me ha salvado la mía», sentencia.

Todos los años se producen en España entre 60 y 70 muertes por vuelco del tractor. Cerca de un 25% de la maquinaria agrícola carece de estructura de protección, según una encuesta elaborada por el Instituto de Seguridad, Salud y Bienestar en el Trabajo (Inssbt). Y es que el parque de maquinaria agrícola es muy longevo, hasta el punto de que supera los 15 años de media de vida. Esto hace que muchos tractores no cuenten con la fundamental barra de seguridad.

De ahí la demanda de las asociaciones agrarias que reclaman un nuevo Plan Renove para la renovación de maquinaría agrícola, con tal de reducir los accidentes mortales y salvar vidas como la de Ramón Vila. El programa de 2017, dotado con 5 millones de euros, dio ayudas a 607 agricultores. El Ministerio de Agricultura destacó a comienzos de año la «buena acogida» que había tenido.