Febrero cerró con un nuevo incremento del desempleo en las comarcas de la Costera (con 42 demandantes más de empleo que el mes anterior) y la Canal de Navarrés (con 33 parados más) como consecuencia sobre todo de la elevada estacionalidad del sector agrícola ante el final de la última campaña, pero también de la mala marcha de los servicios, que ya empujaron al alza el indicador en enero. En la Vall d'Albaida, en cambio, el mercado laboral experimentó una ligera mejoría y el número de desocupados se redujo en una veintena respecto al mes de enero.

En la Costera, el paro agrícola se disparó un 8% en febrero, mientras que en la Canal lo hizo un 16%. Xàtiva y Canals zanjaron el mes con 21 y 11 desempleados más respectivamente, mientras que Ontinyent acabó con 28 parados menos.

En la Vall d'Albaida, donde los servicios fueron el sector donde más descendió el número de demandantes, se han registrado 1.984 contratos en febrero, 245 más que en el mismo mes de 2018, o lo que es lo mismo: un 14'12% de incremento interanual. Por géneros, 807 contratos han sido para mujeres (40'76%) y 1.173 para hombres (59'24%). Solo un 14'49% del total de los nuevos empleos tienen carácter indefinido (pese a aumentar el porcentaje respecto al año pasado) frente al 85'59% de temporales.

En la Costera se formalizaron en el mismo mes 1.385 contratos: 70 más que en 2018 (un incremento del 5'32%). 732 fueron para mujeres y 653 para hombres. Un 83'39% del total de esas nuevas relaciones laborales tienen carácter temporal.

En la Canal de Navarrés se han registrado 490 contratos, un 5'83% más que en el mismo mes de 2018. 267 fueron a parar a mujeres y 223 a hombres. En esta comarca, un 95'31% de los nuevos contratos fueron temporales y menos de un 5% indefinidos, debido a la fuerte presencia de las ETT en las principales empresas que operan en la zona.

El secretario Intercomarcal de UGT-PV, Raül Roselló, ha asegurado que los últimos datos del paro del mes de febrero "muestran un mercado laboral que evidencia su debilidad, con una gran precariedad que propicia fuertes entradas y salidas del mercado laboral y con periodos punta de contratación cada vez más cortos que repercuten en las condiciones de trabajo de los que acaban perdiendo el empleo, y también de los que se quedan".

Roselló pone el foco en la desigualdad del mercado de trabajo en las tres comarcas, donde la mayoría de las personas en desempleo son mujeres (63'28%). Por otra parte, el dirigente sindical advierte de la elevada dosis de precariedad que muestran los contratos registrados y de que la tasa de cobertura de prestaciones de desempleo sigue siendo muy baja, al situarse en el 52'58% en la Comunitat Valenciana.

Para Roselló, "es urgente tomar medidas de carácter progresista que den la vuelta al mercado de trabajo. No tenemos futuro sin una derogación de la reforma laboral, sin un sistema que permita empleo de calidad, estable, con salario para vivir dignamente". "No podemos competir con bajos salarios, para competir con países con desregulación y esclavitud. Con lo que tenemos que competir es con calidad y con valor añadido. En este sentido es en el que nos gustaría escuchar a las fuerzas políticas. El empleo es el problema fundamental de las trabajadoras y trabajadores", sentencia el secretario intercomarcal de UGT.