El inicio de la Reconquista y la Batalla de Covadonga conquistaron ayer Ontinyent en una majestuosa Entrada Cristiana de las fiestas de Moros i Cristians, en la que la comparsa Asturs, este año liderando las tropas de la cruz, rindió homenaje a la dinastía Astur y a la figura de Don Pelayo, representado por el capitán cristiano, Gabriel Ferre Campos. Astures, godos, visigodos, musulmanes, guerreros y batallas conformaron una representación histórica en un espectacular boato con fastuosas escuadras y ballets, bandas de música y carrozas.
A las seis de la tarde y al grito de «Avant Asturs», esta comparsa abría la Entrada desde la avenida Almaig con la Capitania Cristiana exhibiendo las guerras entre godos, nobles y clero, que expulsaron a los derrotados al norte de África, donde pidieron auxilio al moro musa. La escena histórica estuvo representada por el grupo Teatre per a Tots representando al obispo Oppas. Dos escuadras encarnaban a las tropas vencidas y a las huestes musulmanas con la que los vencidos regresaron a la península. Un ballet con «guerreras» armadas con espadas ponía en escena el baile de la lucha de la batalla que suponía el inicio de la Reconquista; mientras otro grupo de baile, con bailarinas ataviadas de negro y de blanco y portando figuras cadavéricas escenificaba la danza de la muerte.
Dos escuadras (una con un espectacular maquillaje mostrando las caras ensangrentadas) simbolizaba a los visigodos guerreros, liderados por el cap batedor, Cefe Micó, a caballo. El sonido de la gaita y el reparto de sidra entre los asistentes, transportaba al público a Asturias, territorio referencia de la comparsa que ostenta la Capitania Cristiana este año, Asturs, la comparsa más joven de Ontinyent, nacida en 1984.
Las escuadras Asturs se abrían paso a continuación representando a los visigodos supervivientes de la batalla de Guadalete, que regresaban al norte, a tierras célticas. Las tribus asturs se unían a los visigodos para enfrentarse a los musulmanes. En el desfile, una carroza desplazaba por el recorrido de l'Entrà „las avenidas Almaig y Daniel Gil„ a los señores visigodos. Guerreros, con las escuadras Covadonga y Khalasar; y celtas, con dos escuadras Aldea Gal·la, desfilaron precediendo a un vistoso ballet que coreografiaba a la diosa Navia (sobre una carroza), diosa y guerreras del agua. Tras ello, los estandartes y la escolta del capitán, con el Primer Tro, Jorge Gil Pastor, anunciaban la llegada del rey astur, el capitán.
Gabriel Ferre Campos desfilaba a pie, seguido por sus dos favoritas „su mujer y su hija„, visiblemente emocionadas, sobre una carroza. El capitán cristiano desfiló al ritmo de la marcha cristiana Creu i Victòria, compuesta especialmente para él por Carlos Ferri Reig e interpretada por la Societat Unió Artística Musical d'Ontinyent durante el recorrido del boato. La obra se estrenó ayer en la Capitania como regalo de la escolta a Gabriel Ferre.
Dos escuadras, una con una variación del segundo traje de Astur y la otra con el traje oficial de la comparsa, cerraban la Capitania acompañadas por la Unió Musical d'Aielo interpretando piezas de Miguel Ángel Sarrió Nadal, Saül Gómez i Soler y Carlos Ferri Reig.
Ambaixada de Gusmans
La Entrada Cristiana se cerraba con el boato de la Ambaixada de Gusmans, con el Ambaixador,Rubén Montava Boluda; y el Banderer, Vicent Xavier Vila i Mas, a caballo. La propia Ambaixada, con los textos de Cervino; y los diferentes estamentos sociales de la Edad Media fundamentaba un boato que recreaba espacios emblemáticos de Ontinyent, así como elementos etnográficos valencianos. Sobresalió la actuación de Pep Gimeno, Botifarra (sobre una carroza que era un lavadero), que interpretó la Jota d'Ontinyent mientras bailaba el Grup de Danses local; y la actuación de la Muixeranga d'Algemesí. El desfile de la Ambaixada incluyó, además de escuadras y bandas de música, una nutrida representación animal con patos, águilas, caballos.
Entre la Capitania de Asturs y la Ambaixada de Gusmans desfilaron el resto de comparsas cristianas: Llauradors, Cides, Mariners, Bucaneros, Estudiants, Arquers, Cruzados, Contrabandistes, Fontanos y Almogàvers. Al cierre de esta edición tenía lugar la Entrada Mora.
