La reforma prevista por el Ayuntamiento de Ontinyent para la calle Sant Antoni cuenta con el respaldo de los vecinos de la calle y del barrio del Poble Nou. Estos participaban días atrás en una reunión con representantes y técnicos municipales y miembros de entidades y asociaciones, y daban apoyo mayoritario al proyecto básico de la actuación, según han destacado desde el consistorio.

El proyecto básico, elaborado por la UTE Miguel del Rey Aynat-AIG Arquitectura, contempla la creación de una nueva plaza y zona de esparcimiento para la ciudadanía. La nueva plaza mantendrá el carril derecho de circulación, que no dará acceso a la Plaça Coronació, y anulará el carril izquierdo, creando allí un nuevo espacio, donde se mantendrá la fuente existente, que data de 1893. Se eliminarán las actuales plazas de aparcamiento, a excepción de las reservadas a carga y descarga, y el consistorio avanza que está trabajando en la creación de nuevos espacios de aparcamientos en las calles de alrededor. La reforma aumentará la vegetación con especies autóctonas y conservando los árboles existentes; se colocará nuevo pavimento de tipo mosaico en la calzada; y se renovará el suministro de agua, alcantarillado, instalando además gas ciudad y telecomunicaciones.

El concejal de Territori, Joan Sanchis, afirmaba que el rediseño está marcado por «la apuesta de poner en primer plano a los peatones, su confortabilidad y su seguridad, una apuesta que sigue las directrices del proceso previo de participación ciudadana realizado para rediseñar la zona, así como las indicaciones del Pla de Mobilitat Urbana Sostenible (PMUS)». Sanchis añadía que la reforma «pondera la importancia de esta zona para fiestas y tradiciones como las Fogueres y procesiones». El consistorio prevé que las obras comiencen el último trimestre de este año.