El proyecto para la construcción de la variante de Quesa, una vía que liberará de tráfico la actual carretera CV-580 que atraviesa el núcleo urbano de la localidad de la Canal de Navarrés, ha superado el informe de impacto ambiental después de ratificarse que el trazado planteado no afecta a ninguna especie catalogada, pese a que la actuación se encuentra dentro de la Xarxa natura 2000, en el área ZEPA Serra de Martés-Mola de Cortes. El Servei de Vida Silvestre ha emitido un informe en el que señala que la obra afecta a una zona de especial conservación, lugar de importancia comunitaria que abarca la Serra de Martés y el AVE, la Mola de Cortes y el Caroig y la Serra de Enguera, entre otras, una zona declarada de especial protección para las aves, pero señala que el tramo de la obra no afecta a ninguna especie catalogada y prioritaria en el Banc de Dades de Biodiversitat de la Comunitat Valenciana. Remarca que la parte de la variante que afecta al límite contiguo a la población de Quesa es una área que “carece de hábitats de interés comunitario y no se han citado especies que puedan verse afectadas por su desarrollo”. “Este proyecto no va a afectar por tanto a ninguna especie catalogada ni a ningún hábitat de interés comunitario, por lo que no poducirá afecciones sobre la ZEPA Serra Martés-Mola de Cortes”, según recoge la resolución de la Conselleria d’Agricultura, Desenvolupament Rural, Emergència Climàtica i Transició Ecològica en el informe de impacto ambiental.

Además, esta resolución también determina la alternativa del proyecto escogida. Tras detectarse algunas deficiencias en el proyecto inicial, se barajaron cinco alternativas diferentes, decantándose finalmente por la alternativa que plantea modificar parcialmente el actual trazado de la CV-580. Así, la actuación que se ejecutará mantendrá el trazado actual y proyecta una variante de la travesía con un carril de sentido único en dirección a Navarrés. Esta variante permitirá liberar de tráfico la actual travesía, al canalizar los flujos de tráfico desde Bicorp hacia Navarrés. Aunque se mantendrán los flujos actuales a través del núcleo urbano, con una alternativa que plantea un rediseño de la intersección de la avenida València-Calle la Font, con una pequeña variación en el trazado de la avenida Corbera, que enlazará con la nueva variante a través de una intersección en forma de “T”. El trazado previsto afectará a unos 218 metros y se expropiarán y demolerán diversos inmuebles para ejecutar la nueva carretera, señala el proyecto. La nueva variante también contará con un carril ciclopeatonal, que se ejecutará en uno de los márgenes de la carretera, excepto en el tramo que discurre entre las parcelas edificadas, por la estrechez de paso, detalla el documento.

La alcaldesa de Quesa, Carina Primo, destacó a principios de este año, cuando la Diputació de València -administración que ejecutará la actuación- aprobó el proyecto que la obra “descongestionará la zona del centro del pueblo”, por lo que se mostraba “muy satisfecha” por los avances del proyecto. Incidía en que la variante “no sacará del todo la circulación del pueblo, algo que también perseguíamos para el beneficio turístico del pueblo”. Y es que la travesía proyectada liberará de tráfico el centro neurálgico de Quesa, la calle más comercial y que más tráfico peatonal concentra, que con la nueva carretera quedará libre de tráfico pesado, pero seguirán pasando los coches, convirtiéndose en una vía semipeatonal, “ensanchando las aceras, que permitirá mejorar el tráfico de vehículos y la seguridad de los peatones”, remarcaba. La actuación rondará los 900.000 euros y habilitará un nuevo tramo viario entre la plaza Diputació y la rotonda de salida del municipio, liberando la calle Conde Castelar, que concentra la mayoría de establecimientos comerciales del pueblo, exponía la alcaldesa, Carina Primo.