Cuatro edificios de Cantereria en Ontinyent siguen pendientes de expropiar

Aunque los trabajos de derribo del primer grupo de viviendas de la zona inundable de Cantereria en Ontinyent han comenzado esta semana, todavía quedan cuatro inmuebles pendientes de expropiación sobre los que el ayuntamiento trabaja para desbloquear el proyecto y allanar el camino a las siguientes fases de demolición. De estas dos edificaciones, dos están ligadas a una entidad bancaria. Los problemas con la Sareb —el banco malo creado por el Gobierno para absorber los activos tóxicos del ladrillo— retrasan la tramitación de los permisos necesarios. Otro propietario mantiene deudas con la Seguridad Social y una hipoteca con cargas, por lo que no puede vender la casa, mientras que el cuarto caso corresponde a una persona que no está conforme con el importe que le ofrece el consistorio.

Aunque las obras de derribo que se han iniciado tienen un plazo teórico de ejecución de dos meses, desde la corporación municipal calculan que podrán terminarse en menos de la mitad de ese tiempo marcado inicialmente si el tiempo acompaña.

Een una visita a los trabajos, el alcalde de Ontinyent, Jorge Rodríguez, incidió ayer en que la intervención —que dará paso a la creación de un futuro parque fluvial— se articula como solución para este espacio después de los episodios de lluvias torrenciales de 2019 y 2020. «Una actuación muy necesaria y transformadora de la ciudad, que permitirá acabar con el peligro para las personas y sumar un nuevo espacio de ocio natural más parecido al lecho original del río, que fue alterado por las edificaciones», señala Rodríguez, que puso el foco en que el proyecto sigue avanzando «después de un trabajo muy intenso para proporcionar al vecindario una solución habitacional».

Un total de cuatro edificios

A estas alturas están derribándose las viviendas que ya son de propiedad municipal, mientras se trabaja en la adquisición de los últimos cuatro inmuebles que quedan por comprar de los 44 incluidos en la actuación. En concreto, la zona en la que se están ejecutando las demoliciones abarca 12 parcelas ya adquiridas por el ayuntamiento, con una superficie construida de 2.477 m² en un área de riesgo de inundaciones.

En breve se iniciarán las obras de estabilización del talud posterior a la Cantereria, que tendrán una duración de tres meses y que estabilizarán las tierras de la parte posterior a las viviendas a derrocar. En su conjunto, el proyecto de Cantereria supondrá una inversión de cerca de 4 millones de euros.

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