Un siglo de culto protestante en Xàtiva

La iglesia evangélica bautista conmemora sus cien años en la ciudad y defiende su futuro, centrado en la labor social que despliegan a través de proyectos sociales, educativos y de atención a mayores

Esteban y Miguel, los dos pastores de la iglesia evangélica de Xàtiva.

Esteban y Miguel, los dos pastores de la iglesia evangélica de Xàtiva. / Levante-EMV

R.Tomàs.

La iglesia evangélica bautista sobresale en Xàtiva en los últimos años por la escuela Betania, un centro referente de la educación infantil en la ciudad, y por la residencia Corona de l’Estrela, de atención a personas mayores. Pero la presencia del protestantismo en la ciudad se remonta más atrás, a hace un siglo, cuando en 1923 se asienta en la capital de la Costera la iglesia evangélica con espacios de culto consolidados. Para conmemorar el centenario, la iglesia de Xàtiva ha celebrado una mesa redonda, con los historiadores Isaïes Blesa (director del Arxiu Municipal de Xàtiva y miembro de la iglesia evangélica de Xàtiva), Ramón Sebastián y Pau Grau; y la exposición “El protestantisme a Xàtiva. Cent anys de presència baptista a la ciutat”, que puede visitarse en la Casa de la Cultura de Xàtiva hasta el 30 de junio.

La historia de la iglesia evangélica en Xàtiva tiene su origen en familias llegadas de localidades próximas donde esta confesión religiosa surge antes, como Navarrés, Sumacàrcer y Canals. Aunque Isaïes Blesa explica que posiblemente antes de 1923 ya habría protestantes en Xàtiva, pero la fecha se fija en ese año, cuando “la iglesia está ya en sitios de culto con continuidad y consolidados”. A partir de entonces, Xàtiva se convierte en la ciudad de referencia para las localidades de alrededor.

Miembros de la iglesia evangélica de Xàtiva en una fotografía de los años 50 del siglo pasado.

Miembros de la iglesia evangélica de Xàtiva en una fotografía de los años 50 del siglo pasado. / Levante-EMV

Los primeros años de la iglesia evangélica son hostiles para esta religión cristiana, por el dominio de la católica. El contexto político tampoco les favorece y los protestantes dependen entonces de las diferentes constituciones, que mayoritariamente beneficiaban a la católica y eran restrictivas con las demás religiones. Hasta que llega la II República y con ella la constitución “más abierta”, la de 1931, destaca Blesa. Pero el Franquismo acabó con todo ello y también con la libertad de culto de las confesiones, entre ellas la protestante, que se adentra entonces en un periodo de “oscurantismo”, con persecuciones, cierre de locales y detenciones. Miguel Fernández, uno de los dos pastores de la iglesia evangélica de Xàtiva -está a punto de jubilarse y ya tiene relevo, el pastor Esteban Ramón- remarca que la persecución “fue atroz’”. La iglesia se mantuvo en Xàtiva en locales abiertos en la Placeta Roca y la calle Sant Vicent, hasta que en 1959 se aprueba el proyecto para la construcción de la iglesia en el actual emplazamiento, la calle Argenteria.

La Transición política abre una nueva etapa de libertad de culto y la iglesia evangélica comienza un nuevo periodo con mayor actividad social, educativa y atención a mayores, las áreas de mayor influencia de la iglesia. Los dos “buques insignia” son la escuela Betania, que este 2023 cumple 52 años y atiende a unos 145 niños y niñas; y la residencia de ancianos Corona de l’Estrela, que tiene las 19 plazas cubiertas y lista de espera, y que celebra este año su 25 aniversario. Son los dos emblemas del protestantismo en Xàtiva y las bases sobre las que se asienta el futuro de la iglesia evangélica bautista en la ciudad. La escuela infantil cuenta con un proyecto diseñado para incorporar los estudios de primaria, un proyecto que está a la espera de la aprobación de la conselleria. “Disponemos de los espacios habilitados para desplegar los estudios de primaria, las aulas necesarias adaptadas”, explica Esteban Ramón.

La actividad de esta iglesia se fundamente en tres áreas: enseñanza, comunión y adoración. Los protestantes se reúnen los miércoles a orar y el domingo se celebra el culto de adoración al mediodía. Además, la iglesia evangélica tiene, durante todo el año, escuela dominical, “catequesis” abierta para todos, una formación separada por edades, que tiene lugar cada domingo antes de la celebración de adoración. Miguel Fernández afirma que ser evangélico, ser protestante es “querer verdaderamente volver a lo que era el cristianismo en los primeros siglos, una forma de adoración muy básica, muy sencilla. Reunirse alrededor de las escrituras, leer la palabra, partir el pan, beber de la copa, vivir en comunión. Ese es el principio de ser evangélico, ser protestante”, remarca el pastor.

Protestantes de Xàtiva reunidos en la iglesia de la calle Corretgeria, este 2023.

Protestantes de Xàtiva reunidos en la iglesia de la calle Corretgeria, este 2023. / Levante-EMV

Esteban Ramón pone de manifiesto el futuro de la iglesia evangélica, “una de las pocas comunidades cristianas que crece”, aunque los dos pastores reconocen la realidad social actual, con unas nuevas generaciones que no han crecido “en un ambiente cristiano”, añade Fernández. El pastor afirma que el futuro pasa por “cubrir las necesidades espirituales de esas próximas generaciones. Ese es nuestro reto”. El acercamiento a estas nuevas generaciones se plasma ya en celebraciones retransmitidas a través de streaming. Esteban Ramón subraya que la celebración del centenario busca también “dar a conocer la iglesia evangélica y tratar de compartir este mensaje a las siguientes generaciones. El futuro pasa por seguir con la labor social y tratar de ser un referente espiritual a las próximas generaciones”, concluye.