El cierre de una oficina bancaria en Alfarrasí moviliza a cinco pueblos de la Vall

El ayuntamiento de la localidad inicia una recogida de firmas para tratar de revertir la decisión ante el descontento vecinal

La oficina de Cajamar en Alfarrasí que acaba de cerrar.

La oficina de Cajamar en Alfarrasí que acaba de cerrar. / Google Maps

Esther Sanz/ R.Tomàs

Los vecinos y vecinas de Alfarrasí, con el ayuntamiento al frente, se han movilizado y han iniciado una recogida de firmas ante el cierre de la oficina local de Cajamar. Desde este 1 de agosto la entidad bancaria ha dejado de operar en el municipio de la Vall d’Albaida, dejando a cientos de personas y entidades sin servicio, una situación que afecta especialmente a la gente más mayor (muchos jubilados y pensionistas) que carece de conocimientos informáticos y no tiene las competencias necesarias para recurrir a la banca online o el cajero automático. El problema, además, no afecta solo a vecinos y vecinas de Alfarrasí, sino también a los de otras cuatro localidades cercanas, que no disponen de oficina bancaria y acudían a la de Alfarrasí. Se trata de clientes de Bellús, Guadasséquies, Sempere y Benissuera, que también se han quedado sin el servicio de la entidad bancaria, que emplaza a la gente a acudir a la oficina de l’Olleria, mucho más alejada de sus poblaciones. La situación ha provocado un gran malestar en los cinco municipios, y muchos vecinos y afectados han hecho llegar sus quejas al ayuntamiento.

Tras el cierre de la sucursal, la entidad bancaria únicamente ofrece a sus usuarios la posibilidad de realizar trámites a través de su plataforma online o en el cajero automático que mantiene en Alfarrasí. Pero esta última opción no ofrece todos los servicios, según se han quejado algunos usuarios, que exponen que este cajero solo permite sacar dinero, pero no ofrece la opción de ingresar dinero ni tampoco la de realizar otras gestiones bancarias, según han expresado algunos de los afectados a este diario.

El Ayuntamiento de Alfarrasí ha emprendido una recogida de firmas para reclamar soluciones a la entidad bancaria. Este lunes emitió un bando municipal para que las personas afectadas se acerquen hasta el consistorio y firmen contra el cierre de la oficina bancaria. El alcalde de Alfarrasí, Ismael Sanvíctor, ha manifestado a este diario que la medida de la recogida de firmas va a extenderse a las otras localidades afectadas. “Voy a reunirme con los alcaldes y alcaldesas de los otros pueblos para que se sumen a la recogida de firmas y hagan también un llamamiento a sus vecinos para que también firmen contra el cierre”, señala el primer edil de Alfarrasí, que también apunta que “vamos a hacer llegar esas firmas a la entidad bancaria y al Banco de España para que se vea la grave afectación que supone el cierre, a la gente que afecta. De modo que cuantos más seamos, más ruido podremos hacer”, declaraba Sanvíctor en alusión a las medidas de presión ante la entidad bancaria que les deja sin servicio.

Ismael Sanvíctor explica que la oficina de Cajamar de la localidad, con los que se ha reunido para buscar alternativas al cierre que no se han aceptado, funcionaba como oficina de agente. “Pero la sentencia de falsos autónomos nos dicen que les obliga a incorporar a esos trabajadores como personal del banco, con lo que la oficina ya no puede funcionar como oficina de agente sino como propia de la entidad financiera”. Los responsables del banco “también alegan para justificar el cierre que el Banco de España exige un volumen de negocio mínimo de 30 millones y que la oficina de Alfarrasí no los alcanza”, señala Sanvíctor, que reconoce que “es verdad que la gente joven tiene menos problemas para operar por internet y que la oficina de Alfarrasí ha ido perdiendo volumen de negocio, pero sigue teniendo actividad. No entendemos los motivos del cierre”. El alcalde pidió a la entidad bancaria “que ofreciera la posibilidad de traer aquí un autobús con oficina móvil, pero nos dijeron que tienen uno que está completo y que el pueblo no estaba en la ruta trazada. La verdad es que no nos han dado alternativa al cierre y no lo están poniendo fácil”, lamenta el alcalde de Alfarrasí. Sanvíctor también planteó que la sucursal, que hasta ahora abría tres días a la semana, redujera los días de apertura, que podrían ser dos días y de este modo, al menos siguiera manteniendo el servicio, “pero tampoco lo han aceptado”. El primer edil critica que “nos han informado diez días antes del cierre, sin tiempo para gestionar nada, ya estamos en agosto, mes de vacaciones”.

Pero el Ayuntamiento se ha movilizado para ofrecer alternativas a los usuarios del pueblo y de los otros municipios afectados. El alcalde también está pendiente de una reunión con el director de la oficina de la otra entidad financiera que opera en la localidad, Caixa Ontinyent. “En esta entidad las comisiones son más altas, por lo que queremos reunirnos con el director para negociar unas condiciones más asequibles, que ofrezcan alguna bonificación por ejemplo para el primer año. Esta entidad puede captar los clientes de la otra, por lo que le puede interesar ofrecer algunas condiciones”, manifiesta el alcalde de Alfarrasí, que señala que esta sucursal abre también tres días a la semana en la localidad.

Ismael Sanvíctor pone de manifiesto que el cierre de servicios como el de la oficina bancaria “no ayuda para frenar el riesgo de despoblación, al que tanto aluden ahora” y apunta que “no tenemos alternativa de un servicio público al que recurrir”. Sanvíctor afirma que “mucho no podemos hacer, porque estamos ante una entidad financiera privada, pero vamos a hacer todo lo que podamos para aportar soluciones que ayuden a las personas afectadas”, concluye el alcalde de Alfarrasí.