El escritor Vicente Muñoz Puelles (Valencia, 1948) realiza un viaje novelado a la "dolorosa" infancia del escritor Charles Dickens en la obra La fábrica de betún, coincidiendo con la próxima conmemoración del bicentenario del nacimiento del autor de Grandes Esperanzas.
El libro es fruto del "empeño" de Muñoz Puelles en homenajear a Dickens. Para ello, el autor valenciano rememora como centro de la acción el episodio de la fábrica de betún, en la que Dickens entró a trabajar dos días después de cumplir los doce años, explica el propio escritor.
Se trata de una época en la biografía de Dickens "que él siempre omitió en sus obras de tintes autobiográficos, acaso porque le parecía demasiado doloroso, y que solo contó a su mejor amigo y primer biógrafo, John Forster, muchos años después". "De hecho, sólo tenemos conocimiento de que ocurrió gracias a la biografía de Forster", agrega el novelista y también miembro del Consell Valencià de Cultura.
"Mi novela empieza tras la muerte de Dickens, cuando Forster, que no cree en fantasmas, titubea a la hora de acometer la biografía de su amigo, a quien conoció cuando ambos tenían veinticinco años, porque le faltan datos sobre su infancia y primera juventud. Entonces aparece en su ayuda el espectro de Dickens, y juntos protagonizan una serie de viajes al pasado", asegura el escritor valenciano.
