«El cine ha sido más reticente a incluir a la mujer y a mostrar su realidad que la televisión», asegura Inés París. Esta cineasta y guionista madrileña imparte hoy una charla en el Institut Valencià d'Art Modern (IVAM) sobre el lenguaje audiovisual feminista. Será a las 19 horas en el Salón de actos del museo. Expresidenta de la Fundación SGAE, expresidenta de la Asociación de mujeres cineastas y de medios audiovisuales (CIMA) y creadora de series como «El accidente», París asegura que «nuestra visión sobre la realidad es profundamente masculina», y es gracias a nuestra cultura audiovisual. «Cambiarla necesita tiempo y esfuerzo. No se puede hacer así como así. Es una carga cultural que tiene raíces muy arraigadas», recalca.
En concreto, la charla de París, «Autómatas, Cyborgs y otras damas. Hacia una poética audiovisual feminista», analizará la representación física y emocional de las mujeres en la pantalla para proponer una «transformación radical no solo en nuestros modos de ver, sino en nuestros modos de crear».
Según la cineasta, la mirada «masculina» es identificable en la clase de lugares retratados, los tópicos o la construcción de personajes y roles. Sin embargo, hay una temática candente que afecta directamente a las mujeres: el amor. «El amor romántico es una concepción muy negativa para las mujeres. Siempre se nos retrata esperando a que alguien nos resuelva la vida. Es un planteamiento que coloca al amor en el centro de nuestra existencia», explica París.
Según la cineasta, el lenguaje audiovisual masculino predomina en el audiovisual, sin embargo, la televisión ha sido más «progresista» en cuestión de género. «El cine en España ha sido mucho más tradicional que la televisión. Llevamos años viendo a parejas de lesbianas («Hospital central») y mujeres empoderadas («Aída») en la televisión. El cine ha estado menos atento de lo que estaba pasando en la sociedad. También ha sido menos inclusivo. En la televisión, hay muchísimas mujeres en los espacios creativos. El cine es más jerárquico, rico y poderoso, y por eso se nos excluye». De hecho, según París, actualmente se hacen «buenas series» que reflejan la realidad de la mujer. Es el caso, según la cineasta, de «Big Little Lies», la serie de HBO producida por Reese Witherspoon y protagonizada entre otras por Nicole Kidman, o «Grace and Frankie», la serie protagonizada por Jane Fonda que retrata la vejez femenina. Se está haciendo una televisión muy buena, con personajes femeninos importantes. Son las actrices que se han implicado en el problema y han adoptado un rol en la producción. Pero no basta con eso».
«Podemos retroceder»
2018 ha sido el año de la evolución del «#MeToo», el movimiento de denuncia tras las acusaciones de acoso y abuso sexual del productor Harvey Weinstein por parte de decenas de mujeres de la industria hollywoodiense. Se convirtió un fenómeno viral que movilizó también a las mujeres de la industria europea. De hecho, CIMA inundó la última gala de los Goya de abanicos rojos con el lema «Más mujeres».
«Se ha conseguido poner el problema sobre la mesa. Ahora hay que hacer que esas ideas se transformen en realidades y evitar que se den pasos atrás. Podemos retroceder», asegura París en relación a la llegada de Vox a la instituciones. «Estas fuerzas atentan gravemente contra la igualdad», recalca.
