La conselleria de Educación ha movido ficha para ofrecer una solución al Auditori Pepe Sancho de Manises, un edificio por acabar por los impagos de la Generalitat del PP y donde enterró entre sus paredes unos siete millones de euros. Ahora, el departamento de Vicent Marzà plantea al consistorio manisero, propietario de la parcela y del complejo, la cesión de las instalaciones a cambio de concluir las obras y trasladar allí su Escuela Superior de Danza y la de Arte Dramático, ubicadas actualmente en el Camí de Vera, en València.
La propuesta de la conselleria nace tras las diferentes reuniones que han mantenido durante la legislatura las dos administraciones, ambas bajo la tutela de Compromís. En 2016, Marzà comunicó al alcalde Jesús Borràs, que la conselleria descartaba finalizar el proyecto tal cual lo ideó el PP -un macroedificio sobre 6.000 metros cuadrados con tres plantas, que albergaría una escuela de artes escénicas, una sala de conferencias, biblioteca, dos aulas prácticas, una estancia para los ensayos, un auditorio para 800 personas y hasta servicio de cafetería-, pero no cerró la puerta a encontrar una salida al pufo heredado.
Ahora, la alternativa que traslada el conseller al ayuntamiento pasa primero, por la cesión de la parcela y del edificio. De tal forma, que el departamento de Marzà se compromete a iniciar los trámites pertinentes para adecuar el complejo con fondos propios y convertirlo en la nueva sede de la Escuela de Danza y Arte Dràmitco de la Generalitat. Dentro del acuerdo, se incluiría que el consistorio manisero tendría la posibilidad de utilizar parte de las instalaciones.
Por el momento, el planteamiento está en una fase muy inicial y las cifras de inversión son vagas. En este sentido, un informe elaborado durante esta legislatura por una consultora externa, cifraba en unos doce millones de euros la cantidad necesaria para concluir todo el edificio.
La alargada sombra de Ciegsa
CiegsaLa propuesta de la conselleria puede supone el epílogo que solucione un proyecto nacido en la era megalómana del PP. En 2005 ayuntamiento (Enrique Crespo) y la Generalitat (Máximo Caturla) firman un convenio para construir la escuela teatro con auditorio Pepe Sancho. El acuerdo señalaba que Manises cedía el suelo y el Consell se encargaba de la ejecución a través de Ciegsa, la empresa pública que montaron los populares para la construcción de infraestructuras educativas y una de las patas del caso Taula. Una vez concluida la infraestructura, el municipio recepcionaría el complejo para su gestión.
En 2007, el alcalde Enrique Crespo (PP) decidió modificar el convenio para convertir al consistorio en el contratante de la obra y el primer pagador, mientras que Ciegsa abonaría posteriormente las certificaciones. El equipo de Gobierno adjudicó la construcción a Midascon por unos siete millones de euros. La empresa quebró poco después y apenas pudo comenzar. Esta situación motivó otra reformulación del convenio volviendo a la realidad inicial. Ciegsa tomaba el control y entregó el proyecto a BM3 por 6,1 millones de euros.
En 2011, tras haber inyectado 6,9 millones de dinero público(un 13% más de lo presupuestado), la constructora abandonó las instalaciones por los impagos de la Generalitat y por el concurso de acreedores al que se vio abocada. Desde aquel momento las obras quedaron paralizadas y nada más se ha movido en un complejo fantasmagórico, abandonado y deteriorado.
