La alfombra roja de los Oscars dejó el domingo grandes looks como el de Scarlett Johansson, Charlize Theron, Brie Larson o Laura Dern, pero hubo uno que destacó entre todos. Quizá no sea el favorito entre la categoría de mejores vestidas, pero fue el vestido más poderoso de la noche.

La actriz Natalie Portman lució un vestido con el que quiso «reivindicar a todas las mujeres que no han sido reconocidas por su increíble trabajo», dijo Portman sobre su vestido, una pieza de Dior diseñada por Maria Grazia Chiuri. El modelo está compuesto por un cuerpo negro de escote corazón cubierto con una capa de tul transparente con detalles dorados rematada con un cuello alto y un cinturón de cuerda que se ceñía a la cintura. Pero la pieza clave del estilismo fue una capa larga en color negro en la que se bordaron en oro todos los nombres de las directoras que este año han hecho grandes películas y no han sido reconocidas por ello.

Scafaria, Gerwig, Wang, Amiel, Diops, Heller, Har'el, Matsoukas y Sciamma son los nueve apellidos que aparecen en la capa de Portman, todas ellas mujeres que han quedado en un segundo plano a la hora de repartir las nominaciones como Mejor director en los Oscars de 2020. Pese a que Mujercitas ha sido nominada en más de una categoría, como Mejor película, Mejor vestuario o mejor actriz secundaria, Greta Gerwig no ha recibido una nominación por la dirección de la famosa historia. Lo mismo ha pasado con Lorene Scafaria, quien dirigió la alabada película Estafadoras en Wall Street.

Lulu Wang, por The Farewell; Amiel por Pearl; Marielle Heller, por Un amigo extraordinario; Alma Har'el, por Honey Boy; Mati Diops, por Atlantico; Melina Matsoukas, por Queen and Slim, y Céline Sciamma, por Retrato de una mujer en llamas son el resto de directoras que este año Natalie Portman ha querido llevar consigo a los Oscars.

Esta no es la primera vez en que la actriz se queja de las pocas oportunidades que tienen las mujeres en el mundo del cine. En 2018 presentó el premio a Mejor Dirección junto al realizador Ron Howard. Ese año los nominados fueron Guillermo del Toro, Martin McDonagh, Ridley Scott, Steven Spielberg y Christopher Nolan y, para presentarlos, la actriz recurrió al sarcasmo: «Aquí están todos los hombres nominados». Una frase muy aplaudida que hizo al teatro levantarse en vítores.