Hay ideas que, aunque a priori suenen bien, no se pueden llevar a cabo. No. La lógica está para algo. Rizar el rizo, a veces, solo sirve para empobrecer el espectáculo. Y eso es lo pasó la tarde-noche de ayer el Ciutat de València en el bautizado como Neox Music Day. El cartel, con Maldita Nerea como anticipo de Juanes y éste como telonero de Dani Martín, era de lo más apetecible, pero los horarios y las altas temperaturas se encargaron de estropearlo. Insufrible. Otra cosa es el ánimo con el que cada uno acudió al concierto y cómo se lo pasó cada uno, porque las fans, mayoritariamente féminas, entregadas a la causa estaban.

 A un recinto casi vacío, salió a cantar Jorge Ruiz. Durante tres cuartos de horas, el líder de Maldita Nerea intentó despertar a la grada. "Hacía años que no tocaba con una luz así", dijo para tratar de justificar lo injustificable. Lo intentó, lo intentó y lo intentó, pero la modorra era generalizada y, el que más o el que menos, al Ciutat había acudido a ver a otros. El sobre esfuerzo cayó en saco roto.

Juanes, durante el concierto A. B.

Juanes sí supo cómo meterse a la grada en el bolsillo. El colombiano echó mano de su repertorio más "popular" para levantar a la gente de sus asientos y convertir la bochornosa tarde en una fiesta. Con muchas horas de oficio a sus espaldas, Juanes no se lo pensó dos veces para bajarse del escenario, pisar el foso y marcarse un íntimo con "Para tu amor". Él daba y, ahora sí, el público respondía. Conforme subía la entrega y bajaba el sol, el Ciutat encendía las luces para que todos los móviles grabara La camisa negra, todo un hit de 2004. Con el ánimo en todo lo alto, Juanes utilizó primero un batiburrillo de sus mejores éxitos y luego su archiconocido "A Dios le pido" para cerrar una puesta en escena en la que no regaló ni un bis.

Si Maldita Nerea bailó con la más, fea, Dani Martín solo tuvo que rematar

Y llegaba el plato fuerte. No tuvo que salir al escenario Dani Martín, para que los y las más jóvenes, ya corearan su nombre, mientras los servicios médicos seguían atendiendo a la gente. Si Maldita Nerea bailó con la más, fea, Dani Martín solo tuvo que rematar cuando más gente había en un espacio muy triste para un concierto. Y vaya que lo hizo, aunque, entre canción y canción, el ex de El Canto del Loco se tomó su tiempo para ir moldeándose a la gente y convencerla con "chapas", como él dijo, excesivamente largas. Su objetivo era tratar de intimar y convencer a los suyos de que éste estaba siendo un concierto único, una experiencia, como decían Enrique Iglesias , religiosa. ¿lo fue? según se mire. Aunque acabó en todo lo alto, al concierto le faltó ritmo.

Dani Martín y Juanes cantaron juntos "Los huesos" en, sin duda, lo mejor de la noche

Lo mejor, sin duda, fue ver cómo dos grandes, Juanes y Dani Martín, compartían escenario y se lo pasaban pipa cantando Los huesos. Pero, para disfrutar de este momento único, hubo que soportar demasiado. Ah, se me olvidaba, ya con el campo vacío y pasada la una de la madrugada, iniciaba su actuación DJ Nano. Si los organizadores esperaban que alguien lo viera, se equivocaron. A esa hora, lo que la gente necesitaba no era música electrónica y sí una ducha