El Valencia Basket se toma unos días para decidir si continúa o no el que ha sido su entrenador en la pasada campaña, Txus Vidorreta. El club mantiene en vilo al entrenador vasco, a quien no le ha comunicado nada, ni siquiera ayer en la comidad de despedida del curso con los jugadores y el cuerpo técnico. El club taronja está valorando a posibles sustitutos, uno de ellos es Jaume Pons Arnau, ayudante de Vidorreta como también lo fue anteriormente de Pedro Martínez en el conjunto taronja. Pons Arnau (Tàrrega, 47 años) fue asistente a su vez de la selección española en la época en que Vidorreta formó parte del cuerpo técnico de Sergio Scariolo. Precisamente el seleccionador de España sería el preparador preferido por los dirigentes del VBC para hacerse cargo del equipo en el futuro, aunque el técnico italiano tiene otras prioridades.

Jarro de agua fría

En una temporada de grandes expectativas, con la inauguración de L'Alqueria del Basket y el acuerdo con el Ayuntamiento para la contrucción de un nuevo pabellón para 15.000 espectadores, el primer equipo ha supuesto un jarro de agua fría. Si bien la ganó la Supercopa de España, después se desinfló en la Euroliga, donde cayó en la primera fase, y más tarde falló en la Liga a pies del Gran Canaria en los cuartos de final del paly off por el título.

Las múltiples lesiones de los jugadores han lastrado al cuadro de Vidorreta, que dice estar «tranquilo» a la espera del veredicto final. El técnico vasco, a punto de los 52 años, se prepara para unas vacaciones con su mujer y sus tres hijos en la playita de Mencia y Gorliz, a 30 kilómetros de Bilbao.