En cuatro horas, la plataforma 'Espíritu del 86' recibió cerca de 400 adhesiones al manifiesto en el que pide al máximo accionista del Valencia CF, Peter Lim, una rectificación y reacción por su parte en la gestión. Al grupo opositor se ha añadido leyendas del club como Mario Kempes, Santiago Cañizares, Fabián Ayala y Javier Subirats, así como representantes de diferentes ámbitos de la sociedad valenciana.

En dicho manifiesto, la Plataforma explica que en los dos últimos meses han intentado contribuir a la sensibilización de la sociedad valenciana, autoridades y medios de comunicación, ante «el gravísimo momento» en el que se encuentra el club, «como consecuencia de una equivocada línea de negocio y conducta, que de mantenerse y confirmarse una serie de obligaciones incumplidas, pueden llevar a la centenaria institución a una Causa de Disolución».

«Partimos con un objetivo prioritario: la rectificación y reacción del máximo accionista. Para ello, y con ánimo de mano tendida, apelamos a su humildad como primer paso para la recuperación de una afición, absolutamente desafecta y ofendida, a nuestra recomendación a conocernos y querernos en vez de evitarnos y al cumplimiento de sus obligaciones», señalan en referencia al incumplimiento de acabar el nuevo estadio

Para esto último, consideran conveniente trabajar la vía legal recurriendo el incumplimiento sistemático de la ATE y la vía de la responsabilidad mercantil-contable requiriendo a la firma Auditora Ernst&Young.

«Agradecimos la firmeza con la que el Ayuntamiento, advirtió de las obligaciones de Meriton con la ley, la ciudad y sus ciudadanos. De la segunda y con su 'acuse de recibo', la auditora sabe de nuestra vigilancia a la que a nuestro entender, implicaría una importante afectación contable al "activo" del club en el caso de confirmarse la inacción de sus mandatarios y la consiguiente resolución de la Actuación Territorial Estratégica», añade.

«Lamentablemente, el objetivo inicial parece inerte. Su naturaleza, su orgullo, su posición de poder les impide rectificar. Al contrario, su incomprensible coherencia la han refrendado con su silencio frente al sector público, con algún doloroso despido, con la tardía adquisición del nuevo entrenador y la inexistente del Director Técnico o con alguna absurda manifestación como aquella realizada en la clausura de una master internacional».

Esta plataforma asegura que no le mueve ningún interés más allá de la exposición del problema y a anticiparse a la posibilidad real de «riesgo letal». «No buscamos notoriedad alguna. Nadie de nosotros aspira a un futuro dentro de la entidad. Sin embargo, vamos a seguir trabajando desde el convencimiento que la convivencia entre Meriton y el valencianismo ya no es posible y más pronto que tarde se verán obligados a marchar».

También apunta la posibilidad, si procediera, de que en la próxima Junta de Accionistas llevar a cabo una impugnación de las cuentas, para lo que explican que necesitarían la unión de algo menos de 40.000 acciones o lo que es lo mismo, del 1% del accionariado.

Cañizares, contra Peñas y APAVCF

Uno de los exponentes más activos del nuevo movimiento opositor es Santiago Cañizares. Horas antes de la publicación del comunicado, el exguardameta internacional repasó en el crítico momento que atraviesa la entidad: «La gran humillación, que yo como valencianista siento, no me la provoca Lim, que si que alcanza una cuota. La que siento de verdad me la provocan la Agrupación de Peñas, del Pequeño Accionista etc... que son colectivos representativos de la entidad y que no muestran disgusto alguno. Y no ya por quienes la representan de los que no espero nada, sino por todos aquellos que forman parte de ellas y que permiten su existencia».