Hace algunas semanas parecía casi imposible, pero el Valencia Basket lo ha conseguido. Su buena dinámica en la Liga Endesa, donde en lugar dejarse ir tras quedarse fuera del Top-8 de la Euroliga ha ido creciendo y sumando victoria tras victoria -acumula seis de manera consecutiva), ha tenido premio. Y es que tras las dos derrotas de esta semana como local del TD Systems Baskonia en sus partidos aplazados (el martes ante el Joventut por 71-79 y ayer ante el Unicaja por 70-79), el conjunto taronja ha recuperado la cuarta plaza de la clasificación y depende de sí mismo para ser cabeza de serie en los playoffs por el título.

Es decir, que si el equipo dirigido por Jaume Ponsarnau se impone este miércoles a domicilio al Herbalife Gran Canaria y el próximo sábado en La Fonteta al Urbas Fuenlabrada no tendría que esperar a ningún otro resultado para amarrar esa cuarta posición y asegurarse el factor cancha en las eliminatorias por el título. Dato más que relevante en este momento teniendo en cuenta que, ya en el partido del sábado ante el Fuenlabrada, el público podría regresar a La Fonteta completando el 30% de su aforo. Es decir, alrededor de 2.700 espectadores que podrían tener un papel clave en el resultado de la eliminatoria. Más si cabe echando un vistazo a la estadística de una temporada en la que ambos equipos se han enfrentado ya hasta en cuatro ocasiones. El balance es de dos victorias para cada uno, en ambos casos jugando como locales, por lo que disponer del factor cancha cobra una dimensión especial en este caso.

En todo caso, al Valencia Basket le podría bastar con ganar sólo uno de esos dos encuentros si el TD Systems Baskonia no gana los dos.