València da ejemplo. La 15K Nocturna València Banco Mediolanum demostró anoche que es posible volver a las carreras multitudinarias que han hecho de la capital del turia la ciudad del running. A pesar de la pandemia. Y de las restricciones que poco a poco se van levantando. Con varias salidas ordenadas por tiempos. Y con un reducido grupo de élite que rozó los récords de la prueba y que estableció media docena de marcas mundiales del año en la distancia. Hubo doblete keniata. Emmanuel Moi Maru detuvo el crono en 42:14, apenas 19 segundos más que el récord masculino de la prueba,de 2019 (41:55). Y su compatriota Joyce Chepkemoi Tele venció en categoría femenina con un tiempo de 47:25, 33 segundos por encima del récord (46:52).
La 15K Nocturna Valencia estrenaba recorrido en esta octava edición, homologado, con salida y meta en diferentes ubicaciones cercanas al puerto. Un amplio dispositivo policial y de voluntarios a lo largo del circuito garantizó el desarrollo de la carrera y trató de minimizar el impacto en la ciudadanía, con cortes de calles que se fueron levantando a medida que pasaban los runners de la última oleada, que se dio a las 23:30 horas, con la previsión de cerrar la meta a la 1:30 de la madrugada.
‘Valencia ciudad del running’ vuelve a latir con miles de corredores, todavía separados por oleadas limitadas a un millar de participantes, pero con los indicadores de la pandemia mejorando semana tras semana. Aunque todavía no se puede bajar la guardia, lo vivido anoche muestra el camino, cada vez más optimista, para el resto de organizadores de carreras populares. El Maratón Valencia Trinidad Alfonso EDP del 5 de diciembre ya se atisba.
