­Por segunda vez en apenas tres meses la CAM se ha visto obligada a elevar la rentabilidad de sus depósitos a plazo para hacer frente a la fuga de fondos que sufre desde su ruptura con Cajastur y posterior intervención por parte del Banco de España, y también como consecuencia de la denominada «guerra del pasivo» que enfrenta a todas las entidades en una lucha sin cuartel por captar el mayor volumen de ahorro posible. Así, si el pasado mes de septiembre la antigua caja alicantina lanzaba un Depósito Creciente que permitía a los clientes conseguir un TAE del 3,09% si mantenían su inversión durante dos años, desde hace unas semanas la entidad ha sustituido este producto por otro en el que se puede obtener un 4% por las imposiciones a un año o un 4,10% si se trata de la modalidad a dos años.

Esto sitúa los depósitos de la CAM a la altura de las ofertas más rentables que se pueden encontrar en el mercado, similar a las de entidades que sólo operan por Internet como ActivoBank (filial del Sabadell) u Oficinadirecta.com (Banco Pastor), y tan sólo por debajo de las que plantean el portugués Banco Espirito Santo, que paga hasta un 4,64% por su Depósito CR (Cristiano Ronaldo), o algunos del Banco Gallego que llegan al 4,25%, eso sí, a cambio de contratar un seguro de vida y domiciliar la nómina.

Igualmente, Bankia también ha elevado el interés de sus depósitos recientemente y en su Depósito 12 Plus Especial puede llegar hasta el 5,09% pero sólo en casos excepcionales con clientes preferentes, según aclaran desde el grupo presidido por Rodrigo Rato. En las imposiciones a dos años, destaca también Tubancaja.es, que renta hasta un 4,25%

En el caso de la entidad alicantina no se exige ningún tipo de vinculación —que es lo más habitual cuando se trata de productos que pueden contratarse en oficina y no sólo a través de Internet— pero la oferta sólo es válida para nuevos clientes o dinero procedente de otras entidades.

De esta forma, los gestores designados por el FROB —el adjudicatario de la CAM, el Banco Sabadell, aún no tiene potestad para tomar estas decisiones— tratan de compensar la fuga de fondos del último año con la captación de nuevo ahorro. En este sentido y según datos de la Confederación de Cajas de Ahorros (CECA), la nacionalización de la CAM y los escándalos protagonizados por sus directivos provocaron que entre enero y octubre los clientes de la caja alicantina retiraron de sus cuentas casi 3.300 millones de euros.

Dura competencia

Además, también ha influido mucho la dura competencia que siguen manteniendo las entidades por captar fondos a pesar de las penalizaciones que impuso el anterior Gobierno a los bancos y cajas que ofreciesen intereses por encima de la media para evitar que la «guerra del pasivo» arruinase las cuentas de resultados del sector.

Las grandes entidades —que son también las más solventes— han esquivado la restricción con la emisión de bonos y otros productos no cubiertos por el Fondo de Garantía de Depósitos, algo fuera del alcance de la CAM en estos momentos dada su delicada situación. Por eso la caja alicantina se ha visto obligada a pagar más por sus imposiciones a plazo a pesar de las repercusiones que puede tener sobre su futura rentabilidad.