El ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, descarta subir el IVA y los impuestos especiales, y considera que Bruselas debe marcar un nuevo objetivo de déficit público para España en 2012 -el actual es del 4,4 % del PIB- que tenga en cuenta el escenario de "recesión". En una entrevista publicada ayer en La Vanguardia, Montoro garantizó que, si Bruselas dibuja un nuevo escenario y modifica el límite de déficit para España para 2012, tal como espera, el Gobierno español "lo asumirá en su totalidad".

Preguntado por si el Gobierno renuncia entonces a reducir el déficit al 4,4 % del PIB este año, lo que comportaría un ajuste de unos 50.000 millones de euros, aseguró que el Gobierno "no renuncia a nada", y que cumplirá "con lo que diga Bruselas".

"Sin embargo, es obvio que cuando se fijó reducir el déficit del 6 % al 4,4 % se hizo con un escenario de crecimiento económico y no de recesión como el que nos encontramos (...) Lo que España defiende es conseguir la estabilidad de forma realista", afirmó.

En este contexto, argumentó que si el Fondo Monetario Internacional ha modificado sus previsiones económicas, el Gobierno español "está esperando a que Bruselas también lo cambie y lo adapte a la nueva situación", y alertó de que si la UE no adapta el plan de estabilidad "no solamente se hundiría España, sino toda Europa".

Preguntado por si subirá el IVA, lo descartó porque ello hundiría más la economía y perjudicaría "a las capas sociales más débiles", y dijo que tampoco tiene sentido subir los impuestos especiales (gasolina, tabacos y alcohol). Por otra parte, el titular de Administraciones Públicas avaló la política de ajustes del gobierno catalán y afirmó que el presidente catalán, Artur Mas, "está evitando que Cataluña se hunda financieramente".

Por otra parte, Montoro avanzó que prevé suprimir "entre 450 y 460 organismos públicos" de todas las administraciones, y defendió que su partido no se plantea una "involución autonómica", porque "los centralistas no están mandando en el PP".

Además, durante un acto en Sevilla, Montoro expresó su esperanza de que el Consejo de Ministros del próximo viernes pueda aprobar el anteproyecto de Ley de Equilibrio Presupuestario, tras consultarla el miércoles con la Comisión Nacional de Administración Local.

Una reforma "urgente"

En su opinión se trata de una reforma "urgente para España" y añadió que dicha ley irá acompañada más adelante de una Ley de Transparencia de Gobierno. Esta última ley recogerá las responsabilidades de los gestores públicos y "las sanciones correspondientes, en términos administrativos y penales, en paralelo a lo que hoy se exige a los administradores privados en España".

Según Montoro, mediante la consulta a la Comisión Nacional de Administración Local los ayuntamientos se verán "comprometidos en el equilibrio presupuestario y en la transparencia de la gobernación pública", ya que las dos leyes que prepara el Gobierno "clarificarán las responsabilidades de los gestores públicos, que estamos sometidos a las leyes, y las infracciones de carácter administrativo o penal que se deriven del falseamiento de las cuentas públicas".

El ministro reiteró que "hay que impedir que tengamos gestores que con su actitud conducen a la ruina de todos".