Los tráficos de automóviles desde las terminales de transporte marítimo gestionadas por la Autoridad Portuaria de Valencia (APV), que incluye instalaciones en Valencia y Sagunt, han registrado un incremento de casi un 30% durante el primer semestre de 2015 (tras las alcanzar las 348.041 unidades) en comparación con idéntico período de tiempo del año anterior. El tirón en la actividad de este tipo de mercancías tiene que ver sobre todo con la apuesta realizada por fábricas de la automoción instaladas en España como Ford Almussafes, General Motors y Renault.
Esta última marca —con factoría en Palencia— inició ayer los envíos desde el recinto de Grao de su nuevo modelo Kadjar, cuyas primeras 200 unidades transportadas en ferrocarril, operado por la compañía Transfesa, inician así su rumbo con destino a diferentes puertos del Mediterráneo. Aunque la multinacional francesa garantiza un elevado volumen de exportaciones a través del puerto de Valencia, su principal recinto para el comercio exterior es el de Santander dada su proximidad geográfica.
Con todo, hasta el pasado mes de junio, Renault ya ha movido 2.953 vehículos a través del puerto de Valencia, lo que ya representa un 58 % más que en todo el ejercicio anterior, según constatan los datos de la estadística oficial de la APV. El enclave marítimo valenciano —el mejor valorado por la patronal de fabricantes Anfac— todavía se sitúa a mucha distancia del tráfico (tanto importaciones como exportaciones) logrado por Barcelona, con mejores conexiones ferroviarias. El recinto catalán, en 2014, transportó más de 748.000 vehículos , el 25% del total del sistema portuario español y un 6% más que el año anterior. Los siguientes del «ranking» son Valencia y Sagunt, que cuentan con cuatro terminalistas que el año pasado movieron 492.279 unidades. Vigo ocupa la tercera posición, con tres terminalistas y 421.502 automóviles. Le siguen Santander, con seis terminalistas y 377.454 coches.
Los grandes puertos de interés general de España quieren aumentar su comercio exterior de vehículos con el aumento de las inversiones en los accesos ferroviarios hasta las terminales marítimas. Renfe Mercancías ha sido uno de los principales operadores en poner en marcha el servicio regular de transporte de trenes de automóviles de 600 metros entre la factoría de Renault en Palencia y el puerto de Santander. Este aumento de capacidad supone dos vagones más por tren hasta alcanzar los 20 vagones, lo que se traduce en 20 automóviles más por tren, un 15% más de capacidad que los actuales trenes.
El puerto de Valencia, a través de la vía Zaragoza-Teruel-Sagunt, quiere aumentar los envíos para la exportación que realiza Opel-Figueruelas. Los empresarios exigen a Fomento una inversión de 45 millones de euros para modernizar esta línea y hacerla competitiva.
