El Grupo CaixaBank ha elevado su beneficio un 74,7 % en el primer trimestre del año, hasta los 704 millones de euros, gracias principalmente al aumento de los ingresos básicos del negocio bancario, la reducción de las dotaciones y los mayores ingresos de participadas. Las cuentas recogen también la incorporación del portugués BPI, que ha contribuido a los resultados del grupo con 40 millones de euros -169 millones si se tiene en cuenta la aportación de sus participadas-, y la contención de costes, pues los gastos recurrentes han crecido un 5,4 %. A dichos resultados, además de BPI, contribuyeron con 520 millones el segmento de bancaseguros y con 211 las participadas, mientras que el negocio inmobiliario restó 67 millones. Total, 704.

Los recursos de clientes del Grupo CaixaBank totalizaban en marzo 351.420 millones, un 0,6 % más. De los recursos en balance, que han subido un 1 %, destaca el crecimiento del 2 % del ahorro a la vista, hasta 162.020 millones, y la reducción sostenida del ahorro a plazo (-7,2 %), hasta 33.230 millones. Por otro lado, los activos bajo gestión subieron un 0,6 %, hasta 97.171 millones, y como en los anteriores trimestres destaca el incremento del patrimonio gestionado en fondos de inversión, carteras y sicavs. El crédito bruto a la clientela se situó en 223.249 millones (-0,3 %) y la morosidad bajó al 5,8 %.