Feria Valencia aseguró ayer que las demandas que medio centenar de sus exempleados van a presentar a principios de la semana que viene, tal como adelantó ayer este diario, para que la institución les abone los salarios que no percibieron desde que fueron despedidos por el ERE de enero de 2011 hasta la resolución del Tribunal Supremo que avaló la nulidad de dicho expediente en noviembre de 2017, «no tiene recorrido», según afirmó un portavoz de la entidad. El abogado de los futuros demandantes, Guillermo Llago, cifró el dinero que estos reclamarán a la Feria y la Generalitat en unos 20 millones.

Las citadas fuentes recordaron que esos extrabajadores -casi la mitad de los 106 que se vieron afectados por el ERE- «han sido ya indemnizados dos veces», con lo que el total de lo percibido supera los 10 millones de euros. Además, «han cobrado ya prestaciones por desempleo y, algunos de ellos, la jubilación y, si quieren percibir los salarios no cobrados, deberán devolver las indemnizaciones».

La decisión del Supremo dio plena validez a la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana que anuló el ERE, fundamentalmente por un error burocrático del entonces director general de Trabajo de la Generalitat, Román Ceballos, y obligó a Feria València a reincorporar a todos los despedidos. La institución, sin capacidad económica para readmitirlos, tuvo que aplicar un nuevo ERE a los que pidieron el reingreso. Pero los extrabajadores siguieron batallando en los tribunales. Finalmente, el pasado agosto las dos partes firmaron un acuerdo que contemplaba una indemnización de 600.000 euros para 36 extrabajadores, que se comprometieron a retirar las demandas que habían presentado. Sin embargo, como explicó Llago, del pacto quedó excluida la reclamación por los salarios no cobrados durante los siete años que duró el viacrucis de los afectados por el ERE.

El abogado va a presentar a principios de la próxima semana una demanda ante los juzgados de lo social y otra cautelar ante la Dirección General de Trabajo que le permita seguir la vía contencioso-administrativa en el supuesto de que la de lo social, en contra de la última doctrina del Supremo, no acepte instruir el caso.

El citado portavoz de Feria Valencia aseguró que el acuerdo del pasado agosto se alcanzó «basado en la buena fe y con el ánimo de zanjar el tema, como prueba el hecho de que, de los 70 pleitos que había planteados en aquel momento, solo dos tenían ya sentencia y las dos eran favorables a la Feria», si bien es cierto que una de ellas interesaba a un exempleado que ya estaba jubilado. La entidad asegura que «defenderá sus intereses hasta el fin», lo que quiere decir que no se sentará a negociar con Llago y sus representantes, y que «se reserva eventuales acciones legales».