Ford Europa y China han lastrado la cuenta de exploración del grupo automovilístico, cuyos beneficios netos se redujeron un 27 % en el tercer trimestre del año para situarse en 3.328 millones de euros. Con todo, en el viejo continente, donde prepara una reestructuración de gran calado para volver a ser rentable en 2019, ha declarado unas pérdidas de 215 millones. La facturación de la firma del óvalo se elevó 96.163 millones de euros, un 2,1% más que el año anterior.