La Unió de Llauradors denunció ayer la venta de chufa procedente de Burkina Faso (África) «en pleno corazón» de su cultivo y de la horchata, en un centro comercial de la localidad valenciana de Alboraia, algo «poco ético y socialmente muy poco responsable». Varios productores se quejaron a la organización agraria de que un hipermercado vendía chufas a 5,99 euros el kilo, «bajo un cartel que indica claramente su procedencia y de que se trata de chufas grandes». Para la Unió, aunque la venta es «completamente legal», se trata de «una clara muestra de competencia desleal» hacia el producto local.