La productividad de la economía valenciana tiene mucho recorrido de mejora. Su valor por ocupado es de 57.205 euros, una cifra 5,5 puntos inferior a los 60.627 de la media española y catorce por debajo de los 66.455 de la europea, según el informe de la competitividad regional en España que publicó ayer el Consejo General de Economistas. Con un 94,4 % respecto a España y un 86,1 % en relación a la UE, la Comunitat Valenciana figura en el furgón de cola. Tan solo cinco autonomías están en peor situación y desde luego se encuentra a un mundo de Madrid y el País Vasco, las únicas regiones que superan la productividad media europea.

Estas dos autonomías, junto a Navarra, integran el grupo de las que disponen de una competitividad alta, mientras que la Comunitat Valenciana, junto a Asturias, Cantabria, Galicia, La Rioja y Castilla y León ,conforman el grupo medio-bajo.

La competitividad aumentó un 5,2 % en el conjunto de España en 2018. El informe confirma que en la última década todas las autonomías superaron los valores que presentaban al inicio de la crisis. En 2018 hubo disparidad en la evolución: País Vasco, La Rioja, Murcia y Cataluña permanecieron estancadas. El consejo augura que esta última empeorará su situación en 2019 por la radicalización independentista y su deriva podría afectar al resto de España. La Comunitat Valenciana registró un crecimiento «leve» frente al intenso o moderado de otras regiones. De las variables que conforman la competitividad, el entorno económico es el único que desciende y mejoran el mercado de trabajo, el capital humano y la eficiencia empresarial.