Tras tres reuniones sin avances, la cuarta cita de la comisión negociadora del ERE lanzado por Ford en Almussafes para 630 empleados de la factoría que se celebró ayer sirvió para acercar posturas entre la dirección de la multinacional y los sindicatos, muy alejados hasta ahora en sus planteamientos del expediente.

Según informaron los representantes de los trabajadores, la compañía se mostró dispuesta a mejorar algunas de las condiciones propuestas inicialmente y que mantenían bloqueadas las negociaciones. Así, se abrió a que las personas que se acojan al plan de invalideces de la fábrica se descontarán del total de despidos, por lo que se aminoraría el alcance del expediente y se evitarían entre 30 y 60 salidas de las 630.

En cuanto al principal punto de fricción hasta ahora, la edad de las prejubilaciones, Ford también mejoró su oferta al mostrarse dispuesta a ampliar el rango para incluir a los de 56 años. Hasta ahora la edad estaba fijada en los 57 y los sindicatos reclaman expandirla hasta los 55 años. La propuesta de la dirección, en todo caso, comportaría reducir el complemento salarial de los menores de 57, aunque no concretó cuánto.

La tercera mejora ofrecida afecta a las bajas incentivadas, en las que ofrece garantizar un año de salario. Esto mejoraría las salidas para esos empleados de reciente incorporación al asegurarles una indemnización algo mayor a la que recibirían.

Los sindicatos admitieron «pequeños avances», pero piden abrir el ERE a la planta de motores y alargarlo hasta evitar salidas forzosas.