Las pensiones, las prestaciones por desempleo, los gastos de personal y el pago de los intereses de la deuda suponen el 52,96% del gasto total contemplado en los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2022, según consta en el proyecto remitido ayer por el Ministerio de Hacienda al Congreso de los Diputados. Estas cuatro partidas suman un total de 243.074 millones de euros, lo que equivale al 52,96% de los 458.970 millones de euros de gastos presupuestados.

El mayor gasto del presupuesto será el de las pensiones, que concentrarán 171.165 millones de euros, un 4,8% más respecto al avance de liquidación del presente ejercicio, así como un 37,29% del gasto total. El gasto en esta partida se ha visto incrementado en un 74,64% desde 2008, cuando ascendía a 98.011 millones de euros.

Los PGE para 2022 incorporan incrementos para las pensiones contributivas y para las pensiones mínimas y no contributivas, que beneficiarán a un total de 10 millones de pensionistas. Para las primeras, se espera una subida por encima del 2%, tras la revalorización con el IPC, mientras que las mínimas y no contributivas se alzarán un 3%, de acuerdo con el proyecto de Presupuestos.

Por su parte, la partida de desempleo cuenta con una asignación de 22.457 millones de euros, un 10,2% menos, ante «la mejora del empleo y la reducción del paro», según explicó la ministra de Hacienda y Función Pública, María Jesús Montero. Esto supone el 4,89% del gasto total.

115 % del PIB

En cuanto a la deuda pública, la partida vinculada a su coste asciende a 30.223 millones, un 4,7% menos, debido a la esperada reducción de la deuda (hasta el 115% del PIB) y del déficit (5% del PIB) para 2022. El coste de la deuda tiene un peso del 6,58% sobre el gasto total. Pese a la contención, la cifra es casi el doble de la que suponían los intereses de la deuda en 2008 (15.265 millones), cuando la deuda pública no representaba más del 34,3% del PIB y ahora supera el 120% de la riqueza nacional.

De su lado, los gastos de personal suman 19.229 millones de euros, el 4,2% del gasto, en el que se incluye la subida del 2% del salario de los funcionarios planteado por el Gobierno para 2022.

Por distribución de grandes áreas de gasto, el 54,1% de los Presupuestos corresponde a gasto social, el 29,1% a actuaciones de carácter general, el 11,4% a actuaciones de carácter económico y el 5,3% a servicios públicos básicos.

De entre las partidas destinadas al área de gasto social, se destaca el refuerzo de la protección de los más vulnerables para lo que se dotará con 4.436 millones de euros la partida destinada al pago del Ingreso Mínimo Vital y a las prestaciones familiares. Además, se incrementan en 48 millones las dotaciones para el Bono Social Térmico, hasta alcanzar los 157 millones de euros. Se trata de un aumento del 43,77% interanual y tendrá 1,27 millones de hogares beneficiarios.

El Estado ingresará 279.316 millones de euros en 2022, lo que supone un incremento del 10,8% y que tiene en cuenta la continuación de la recuperación económica tras la fase más dura de la crisis sanitaria y la llegada de los fondos europeos. Los ingresos impositivos alcanzarán los 232.352 millones de euros, el 8,1% más, mientras que los no tributarios subirán el 26,9%, hasta los 46.964 millones. Además, el Gobierno prevé recibir 20.225 millones de euros procedentes de los fondos europeos en 2022.

La Seguridad Social recibirá el próximo año en aportaciones del Estado un total de 36.276 millones de euros. Los considerados servicios públicos básicos, que incluyen la seguridad ciudadana e instituciones penitenciarias, la defensa, la justicia y la política exterior y de cooperación para el desarrollo, se quedarán con 5,3 euros de cada cien (al elevar el importe destinado un 7,8%). La partida de desempleo cuenta con una asignación de 22.457 millones, un 10,2% menos, ante «la mejora del empleo y la reducción del paro».

La ministra de Hacienda y Función Pública, María Jesús Montero, afirmó ayer en el Congreso que asume que «va a haber más pretensiones» de los socios con los que el Gobierno pretende sacar adelante sus Presupuestos del Estado para 2022, pero confía en que estas se limiten a cuestiones referidas a las propias cuentas. Y es que Montero señaló que «una cosa es el proyecto de Presupuestos y otra los múltiples diálogos y debates que el Gobierno puede tener abierto».

La portavoz del Grupo Popular en el Congreso, Cuca Gamarra, aseguró, ante el hecho de que los PGE incluyan una inversión en Cataluña que es el doble que la de Madrid, que el jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, solo busca seguir en Moncloa aunque existan «desequilibrios entre territorios» y por eso hay «privilegios a unos a costa de otros».

Por su parte, la portavoz de Junts per Catalunya en el Congreso, Míriam Nogueras, se mostró dispuesta a negociar los Presupuestos pero reivindicó hacerlo «en un bloque catalanista», es decir, junto a Esquerra Republicana de Catalunya, ya que considera que «negociar por separado sólo beneficia al PSOE».

El portavoz de Unidas Podemos en el Congreso, Pablo Echenique, dijo que los PGE para 2022 son las cuentas públicas «que rompen dos tabúes, que parecían «imposibles» hasta hace poco, como es intervenir el mercado del alquiler o subir los impuestos a las grandes corporaciones.

El PP critica que Cataluña reciba el doble que Madrid

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