El impacto de la tasa turística que acaba de aprobar esta semana el pleno de Les Corts Valencianes en la actividad de cruceros comienza ya a ser analizado por la dirección de Valenciaport y las navieras que operan en el recinto del Grao. La Autoridad Portuaria de València (APV) sostiene que todavía es pronto para evaluar su impacto económico global en el turismo de cruceros, y habrá que ver finalmente cómo repercuten las navieras dicha tasa a los turistas que hagan escala en la capital del Túria aunque no pernocten en su emplazamiento marítimo.
En principio, la tasa turística afecta a los hoteles de tres, cuatro estrellas y superior, donde se pagará 1,5 euros y en el resto de hoteles, un euro. En el ámbito rural será 1,5 euros para los establecimientos de lujo; un euro para los de cuatro y tres superior y 0,5 para los de tres estrellas o menos. Los cruceristas tendrán una cuota de 1,5 euros cuando hagan escala en un puerto valenciano.
Los ingresos que se obtengan por este tributo indirecto propio se destinarán íntegramente, según la norma, a inversiones y gastos vinculados tanto a la promoción, impulso, protección, fomento y desarrollo del turismo sostenible en la Comunitat Valenciana, como a la mejora de servicios o políticas de acceso a la vivienda de afectados por la afluencia turística.
Las previsiones del Puerto de València apuntan a que 2022 será un año estelar. Así, estima que pueden cerrar el año con cerca de 800.000 pasajeros de cruceros, lo que supondría casi duplicar los 435.000 registrados en 2019. Lo que está por ver es si la nueva tasa reducirá la afluencia de turistas.
La Autoridad Portuaria de València espera recibir 291 escalas de cruceros hasta finales de 2022, una cifra muy por encima de las 203 escalas conseguidas durante la prepandemia.
Según afirmó recientemente la directora de Cruceros y Marketing de Valenciaport, Francesca Antonelli, las cifras para los dos próximos años son «muy alentadoras». Desde el certamen Seatrade Cruise Global, que se celebró en Miami Beach (Florida), Francesca Antonelli también destacó la necesidad de trasladar el impacto positivo de los cruceros a las poblaciones de interior. Para ello, se está trabajando en la creación un catálogo de experiencias de naturaleza, cultura y gastronomía que puedan ser ofertadas a los miles de cruceristas que desembarcan cada año.
