Son tan buenos los dos grandes adornos luminosos de 2012, que el veredicto debía dejar algún herido por el camino. Y así fue. El efectismo de la Torre Eiffel de Sueca-Literato Azorín prevaleció sobre el montaje floral de Cuba-Literato Azorín y se llevó el primer premio, que deshizo el polémico empate del año pasado.

Y así, mientras el presidente de Sueca, Bernardo Morosoli, mostraba su satisfacción por al victoria, directamente proporcional a su monumental enfado en 2010, cuando perdió la hegemonía en esta especialidad; el presidente de Cuba, José Gimenez mostraba su insatisfacción, directamente proporcional a la alegría por la victoria en aquel año en el que se instauró una nueva competencia en la fiesta y que el año pasado había quedado en unas tablas que dejaron fríos a todos. Así, Giménez aseguró que "el ex aequo del año pasado fue incomprensible y el segundo de este año también lo es. Hay veces que te cansas cuando ves que son miles y miles los que dicen que tu montaje es mejor. Pero las fallas están montadas así. Lo tienes que asumir o dejarlo y eso es lo que te tienes que plantear". El presidente ruzafeño se preguntaba "por qué no van profesionales de la iluminacion y, preferiblemente, que no sean de Valencia para que no estén sometidos a ninguna presión" y pensaba en preguntar a la Junta Central Fallera cuales son los criterios para puntuar. "Al final, va a resultar que si no te dan el premio compartido, no te lo dan nunca". En cualquiera de los casos, quien ha ganado con esta competencia es el público, que puede disfrutar de forma gratuita de un espectáculo luminoso de primer orden en una y otra calle. La otra sorpresa fue el tercer premio de la Carrera de Malilla, que superó a Cuba-Puerto Rico.

En la categoría B, la victoria fue para Duque de Gaeta, por delante de Maestro Gozalbo, en una competencia que, de alguna forma, se repetirá con los monumentos falleros de Primera A dentro de unos días.