Tres especialistas en pirotecnia valencianos han participado en la serie de disparos que se han celebrado en los Emiratos Árabes Unidos con motivo del Año Nuevo, y que han servido para hacer de sus ciudades principales un nuevo espejo de lo que se consideran grandes espectáculos de fuegos artificiales.
Entre ellos ha destacado por sumar dos récords del mundo: el disparo más largo de forma ininterrumpida: 35 minutos sin dejar en ningún momento de haber carcasas estallando y el del disparo de forma simultánea de 300 ruedas.
Luis Brunchú ha formado parte del operativo que ha llenado el Golfo Pérsico de fuegos artificiales. Desde hace unos años se le ve en el balcón cuando dispara la Pirotecnia Zaragozana, que "pertenece desde hace unos años a la multinacional francesa Lacroix, que tiene una Delegación Internacional de Pirotecnia llamada Ruggieri Internacional. Éstos han sido los que nos han demandado para participar en el montaje de varios espectáculos en Emiratos Árabes, entre ellos Sharjah, Al Ain, Abu Dhabi y Dubai y han destacado especialmente el disparo de los récords y el del hotel Atlantis". En este último, un concierto del grupo Kiss también se ha inscrito en el libro Guiness por generar la llama más alta en un concierto.
"Hemos venido a poder trabajar un poco dentro de éste nefasto año, y a ver si cogemos el siguiente de mejor manera. Aquí se nota que optan por el turismo, realizando varios grandiosos espectáculos, intentanto implantar las mayores medidas de seguridad. Somos un grupo de seis técnicos desde España, tres de ellos de Valencia, y unos veinte franceses, sin contar con la mano de obra local". Finalmente, los fuegos emiratíes han vuelto a ser, junto con los de Sidney, la postal más reconocible del cambio de año.
