El municipio de Museros contará con un Pla General de Ordenación Urbana (PGOU), después de 12 años desde su primera redacción. La pleno lo ha aprobado en una sesión extraordinaria, con los votos a favor del PSOE, Esquerra Unida y Compromís y con la oposición del Partido Popular.

La propuesta final llega después de un largo proceso que se inició en 2007, con una iniciativa del gobierno conformado por el PP-BLOC y SIM, que fue aprobada por unanimidad al pleno, pero que la Consellería de Urbanismo y Territorio tumbó, al argumentar que había que hacer algunas modificaciones. Aun así, los cambios nunca llegaron porque la empresa encargada de la redacción, entró en concurso de acreedores.

Ante esta situación, el gobierno local ha criticado que su predecesor «permitió que el proceso quedara paralizado». Y en el año 2015, momento en qué se produjo un cambio de signo político en el ejecutivo (PSOE, Compromís, Podamos y Esquerra Unida hicieron una coalición), se decidió reiniciar la tramitación del PGOU. ciar la tramitación del PGOU.

De este modo, la concejalía de Urbanismo e Infraestructuras, encabezada por el actual regidor, Vicente Pérez, tuvo que solicitar el apoyo de la Diputación de Valencia, a través del servicio de asistencia municipal. La entidad asignó al Ayuntamiento de Museros un nuevo equipo redactor y subvencionó el 49% del coste de licitación, que ascendía a 90.000 euros. Así, el consistorio invirtió alrededor de 46.000 euros en la redacción del PGOU.

Finalmente, después de tener en cuenta los correspondientes informes de la administración y las alegaciones de las personas interesadas, el equipo de gobierno presentó la propuesta final del plan urbanístico que, no obstante, no contó con el visto bueno del PP, aunque en febrero de 2018, momento en que se aprobó la versión preliminar del plan, los populares votaron a favor, teniendo en cuenta que se trata de un documento que, inicialmente, fue propuesto por su equipo de gobierno.

«Falta de argumentos»

Para el edil de Urbanismo e Infraestructuras, Vicente Pérez, esta determinación prueba «la falta de argumentos lógicos y de criterio, así como el desconocimiento total del urbanismo y la planificación del territorio de Museros». «Los populares de Museros van a la deriva política, cambiando su posición sobre un documento tan necesario para el futuro de Museros», ha afirmado.