Parece una historia digna de un cuento de Navidad pero que ha ocurrido realmente en un centro escolar de Alfafar. La dirección y los docentes del Colegio María Inmaculada se toparon el lunes al abrir el centro con que unos vándalos habían destrozado el huerto que se encargaba de cuidar el alumnado.
La imagen, según escribe la dirección del colegio, era desoladora cuando llegaron en torno a las 8.45 horas. «Encontramos ya que el grifo manual que utilizamos para regar estaba abierto. Nos acercamos al huerto y estaba todo completamente destrozado y tierra por todas partes. Habían roto todos los maceteros y lo peor es que se habían llevado los árboles que teníamos, un limonero, un peral, un aguacatero, un mango y un mandarino», explican.
Enseguida llamaron a la Guardia Civil para dar parte y poner una denuncia. El colegio que está vallado, en uno de sus laterales linda con un solar y sospechan que pudieron entrar los vándalos en una furgoneta y desde el techo acceder dentro del recinto saltando la valla. «Estamos estudiando la posibilidad de aumentar la altura del vallado y de colocar cámaras de vigilancia en el patio», matiza el centro.
Sin embargo,tras lo ocurrido, la dirección del colegio decidió hacer algo que cambiará la situación radicalmente. Decidieron subir a la cuenta de facebook del colegio las fotos de los destrozos «y enseguida empezamos a recibir comentarios y mensajes de gente que se ofrecía a ayudar y a reparar los daños e incluso de Ampas de otros colegios que no eran ni de Alfafar», señalan.
Ante esta reacción, la dirección del colegio María Inmaculada decidió hacer un llamamiento para que a las 15 horas acudieran al centro aquellas personas dispuestas a ayudar. Lo que no esperaban es que acudían unas 15 personas, padres y madres de alumnos y alumnas, que en poco más de una hora ya habían restaurado prácticamente el huerto.
Además, una de la madres acudió con unos plantones de plantas aromáticas que desinteresadamente había ofrecido una floristería del Mercado Municipal al conocer el suceso.
«Pudimos plantar esas plantas aromáticas y como también se llevaron las habas pero aún nos quedaban semillas, compramos más composta y plantamos más habas a ver si da tiempo a que salgan de nuevo», explican.
Daños valorados en 1.000 euros
Lo que no han podido recuperar son los árboles frutícolas, «pero confiamos en que el seguro nos pueda costear algo ya que hemos valorado los daños en casi 1.000 euros», explican desde la dirección, que pese al daño causado «no podemos estar más agradecidos. Estamos abrumados con tantas muestras de solidaridad, hemos recuperado el huerto apenas unas horas después de verlo destrozado». Ahora en Facebook, las fotos de los destrozos han sido sustituidas por otra foto de un «gracias» pintado con tiza en una pizarra.
