El Teatro del Mercado de Aldaia acogió la proyección del documental «El proxeneta. Paso corto, mala leche» enmarcado en la programación del departamento de Igualdad. Tras el visionado del documental se realizó un coloquio con su directora, Mabel Lozano.
En el acto, estuvieron presentes el alcalde de Aldaia, Guillermo Luján, y la edila de Igualdad, Encarna Comes. Durante la presentación Guillermo Lujan recalcó que «la lucha contra la prostitución, la trata y la explotación sexual es prioritaria. Mabel Lozano es una referente en este ámbito y estoy seguro de que esta jornada nos ayudará a aprender y a reforzar esta tarea», afirmó.
Por su parte, la edil de Igualdad, Encarna Comes, destacó «el gran trabajo que están desarrollando todas las personas que formal parte de este equipo de luchar por una sociedad más justa e igualitaria, a través de iniciativas que son pioneras en este ámbito y nacen desde una visión pedagógica».
Según explican desde el departamento municipal de Igualdad de la localidad, esta presentación se enmarca dentro de las actividades impulsadas por durante este mes en el que se conmemora el 25 N, Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres. En este sentido, Mabel Lozano expuso que «siempre hay que conmemorar este día, primero para que no nos olvidemos de la desigualdad todavía estructural entre hombres y mujeres y de la violencia que se ejerce sobre la mujer».
El documental proyectado se encuadra en sus obras que luchan contra la explotación sexual y la trata de mujeres, una temática que ha abordado en otros de sus trabajos como «Callar No Es Una Opción», «Chicas Nuevas 24 Horas», «Escúchame» o «Voces contra la trata de mujeres».
En este sentido la directora explicó que «una de las formas más perversas de violencia de género es la trata, la explotación sexual, la prostitución. Pensamos que la violencia que se ejerce sobre la mujer es solamente en el ámbito de pareja y expareja, pero hay muchas otras formas de violencia, como en este caso la que estamos abordando esta tarde, que además es una vulneración de todos los derechos humanos».
Además, quiso destacar que «El proxeneta. Paso corto, mala leche» es un documental muy especial porque está contado en primera persona por un proxeneta, «nunca escuchamos al victimario, siempre escuchamos a las víctimas, o sobre todo hablamos de ellas en tercera persona».
