Tercera ola letal. La incidencia de mortandad en la comarca en lo que llevamos de 2021 a causa del coronavirus está desbocada y, por el momento, parace no tener freno. A fecha 30 de enero, último día en el que la Conselleria de Sanitat publicó los datos oficiales por municipios, l’Horta alcanzaba los 684 personas fallecidas desde el inicio de la pandemia, de las cuales 262 se contabilizan solo en el mes de enero de este año.
La evolución de las muertes en la comarca ha sido desigual, con un pico muy pronunciado con la entrada de 2021, tras las vacaciones de Navidad. En fecha dos de julio de 2020, con la nueva normalidad ya vigente desde el 21 de junio, los 43 municipios de l’Horta sumaban un total de 213 personas fallecidas desde el inicio de la pandemia.
Pasó el verano y, poco a poco, los contagios empezaron a contabilizarse como un goteo constante hasta llegar a una segunda ola a las puerta de las navidades. Así, la comarca cerraba 2020 (a 28 de diciembre) con un total de 422 muertes por covid. Es decir, en el segundo semestre del año, se registraron casi las mismas muertes (209), que de marzo a junio, en lo que se denominó la primera ola de la pandemia.
Ahora bien, la relajación, los encuentros navideños y otros circunstancias han disparado los contagios en lo que va de 2021, con una tercera ola que deja datos que superan, de largo, los registrados en las dos anteriores. Así, a 30 de enero, las defunciones en l’Horta alcanzan las 684. La cifra supone un incremento del 38,3% (262 más) respecto a solo un mes antes. Cabe puntualizar en este sentido, que los datos que ofrece Sanidad presentan un ligero retraso, con lo que es problable que, realmente, algunas de las 262 defunciones contabilizadas ya en balances de enero, correpondan a la última semana de diciembre.
Analizando la situación por municipios, se observa que Torrent es la localidad con más defunciones. La capital de l’Horta Sud contabiliza hasta ahora 123 muertes. Si bien entre marzo y junio se registraron 55 muertos (en parte debido al brote que sufrió la residencia de mayores Santa Elena), en el segundo semestre del año solo se sumaron 28 (83 en total). Por contra, en enero, han fallecido 40 personas, lo que representa el 32,5% del total (123).
El Puig, Picassent, Silla y Sedaví
Casos destacable son los del Puig de Santa Maria, Picassent, Sedaví o Silla. En el primero, se registró uno solo fallecimiento hasta el 2 de julio. En cambio, cerró 2020 con 21 defunciones, a causa del brote detectado en octubre en una residencia, con 140 contagios. En enero apenas ha sumado cuatro muertos más. En cuanto a Picassent, la población de l’Horta Sud tuvo cinco muertes en la primera ola. Concluyó el año con 9, es decir, cuatro personas fallecieron entre julio y diciembre. Ahora, alcanza las 39 personas fallecidas, también en parte a consecuencia de dos brotes detectados en sendas residencias de mayores en diciembre.
Por su parte, Sedaví o Silla pasaron de tener uno o ningún caso en la primera ola, a cerrar el año con dos y cuatro, respectivamente. Actualmente, Sedaví suma once fallecimientos (ocho de ellos en enero) y Silla acumula nueve (cinco en el pasado mes).
Cuatro pueblos se mantienen a salvo de fallecimientos
Desde que arrancara la pandemia, solo cuatro municipios de la comarca han logrado mantener a cero el casillero de defunciones: Emperador, Llocnou de la Corona, Massalfassar y Vinalesa, pese a que han registrado 17, 2, 125 y 153 positivos, respectivamente. Por su parte, tanto Alfara del Patriarca como Beniparell se mantienen con un solo fallecido desde la primera ola, mientras que Bonrepos, que no tuvo muertes en los primeros meses, ahora suma dos, al igual que Rocafort, que ha comenzado el año con una defunción. Museros no ha tenido muertos en 2021.
