Las malas relaciones entre el Partido Popular y Ciudadanos de Rocafort, que se han intensificado en los días en los que se tiene que preparar el relevo en la alcaldía, ha provocado que las direcciones provinciales y comarcales de ambas formaciones pongan en marcha la maquinaria negociadora para tratar de suavizar tensiones. El edil de Ciudadanos, Guillermo José Gimeno, dimitió como alcalde el pasado viernes y, en teoría, la semana que viene tendría que celebrarse el pleno para que asuma la vara de mando el popular Agustín Aliaga. Pero un día antes de la sesión plenaria, que se celebró de forma telemática, José destituyó a los ediles del PP y Vox de sus competencias y además alteró el orden de las tenencias de alcaldía, de forma que se ha quedado en el puesto de forma accidental la concejala de Ciudadanos Rosario Marco.
La mandataria restituyó ayer las delegaciones que su antecesor había retirado a todo el equipo pero, con la decisión, no se ha resuelto el problema completamente ya que en el PP se teme que los dos ediles de Cs no voten a Aliaga la semana que viene, con lo que acabaría gobernando el PSPV en minoría, por ser la fuerza que obtuvo más votos en las elecciones municipales de 2019.
Por ello, tanto los dirigentes comarcales del PP, que están tratando de mediar para retener este municipio, como la dirección provincial han instado a Ciudadanos a cumplir su parte del pacto. «Durante dos años, el PP ha cumplido hasta la última coma. Ahora le toca a Ciudadanos si quiere ser un partido serio», afirman.
En la dirección provincial se incide, no obstante, en que «frente a la actitud del PP», Ciudadanos ya ha incumplido el pacto, al modificar las tenencias de alcaldía para que fuera alcaldesa Rosario Marco, en lugar de que el cargo pasara de forma interina a Aliaga. Además, recuerdan que en Massalfassar o en Vilamarxant «el relevo se ha producido sin problemas, al contrario que en Godelleta». Por ello, su Ciudadanos incumple de nuevo «dejaría de ser un socio fiable».
Por su parte, la dirección de Ciudadanos es clara en el mensaje que ha transmitido a sus ediles de Rocafort: hay que cumplir el pacto que se acordó al inicio de la legistatura. El partido está por seguir gobernando con el PP y Vox en Rocafort, por lo que alerta a sus representantes en el pleno de que, si no propician el relevo, se les aplicará el reglamento del partido, que implicaría sanciones y expulsión.
Contratación de un técnico
La insólita decisión de destituir a todo el equipo local fue argumentada por Ciudadanos a Levante-EMV en el hecho de que se pretendía frenar una reserva de crédito que ha realizado el concejal de Cultura, Gorka Gómez, (y no Agustín Aliaga como por error publicó ayer este diario) para la contratación de un técnico de sonido para un acto en noviembre, «cuando existe un funcionario municipal que realiza esa función y cobra un plus de 500 euros mensuales por ello».
No obstante, Gómez ha asegurado que la única reserva de crédito que ha tramitado, y que supone una partida de 500 euros, es para contratar una actuación a un grupo de la población y no para costear el apoyo técnico. «No lo entiendo. Si de verdad tenían dudas, lo lógico era haberme llamado y les hubiera aclarado el concepto. O incluso podríamos haber acordado anular la reserva», esplicaba ayer el edil de Cultura, sin dar mucho crédito a la excusa.
Gorza Gómez recuerda que ambos partidos han estado trabajando «codo con codo» dos años y, si bien las tensiones han aumentado tras la destitución anterior de otra edila, aún ve posible reconducir la situación.
El PSOE «está preparado para volver a gobernar»
El responsable de Política Municipal del PSPV, Carlos Fernández Bielsa, valoró ayer que ante la crisis institucional, «la preocupación de la ciudadanía de Rocafort va en aumento». «El pacto de gobierno entre c’s y PP es evidente que no goza de buena salud tras más de dos años de discrepancias, desconfianzas y tensiones que han afectado seriamente al futuro de Rocafort», dijo el dirigente, además de incidir en que «el PP ha demostrado no estar a la altura». Bielsa aseguró que el PP «ha estado desaparecido estos dos años de gobierno, sin ayudar, sin trabajar y con el único objetivo politico de obtener la alcaldía». «Por tanto, lo lógico ahora, si finalmente fracasa el pacto, es que gobierne el partido más votado en las elecciones municipales. El PSOE está preparado para volver a gobernar con eficacia y devolver la estabilidad a Rocafort, desde el respeto, el diálogo y el máximo consenso, que tanta falta hace», concluye.
