El Ayuntamiento de Albal retiró este pasado viernes un vertido ilegal en la zona industrial, los trabajos se alargaron durante todo el día.
Este espacio sufre reiteradamente la llegada de vertidos, escombros y restos de poda, algunos de los trabajadores de la zona colaboran de manera anónima con el Ayuntamiento para la detección de los infractores.
El alcalde Ramón Marí ha lamentado la actitud irresponsable de personas que utilizan cualquier espacio de la vía pública para deshacerse de enseres voluminosos, que ensucian el paisaje y que atentan contra la salubridad y seguridad ciudadana, "prácticas incomprensiblemente arraigadas", lamenta el primer edil.
Desde el Gobierno Local señalan que la recogida de estos restos y enseres supone un alto coste para las arcas municipales por lo que insiste en la necesidad de denunciar y colaborar en la vigilancia colectiva, ante estas acciones sancionables que atentan contra el paisaje y el medio ambiente de la localidad. la necesidad de denunciar y colaborar en la vigilancia colectiva, ante estas acciones sancionables que atentan contra el paisaje y el medio ambiente.
Por este motivo, una vez más pide la colaboración y concienciación ciudadana para denunciar esta mala práctica que puede ser sancionada a través de la ordenanza municipal de residuos.
La instalación de cámaras y los patrullajes por las zonas no ha conseguido disuadir a los infractores, aunque algunos casos están siendo investigados por las fuerzas de seguridad.
El consistorio recuerda que Albal dispone de un punto fijo de residuos, el ecoparque, y también una vez al mes recibe el punto móvil de la EMTRE que se coloca frente a la Cooperativa, para facilitar el cumplimiento de sus competencias en materia de residuos y permitir a los vecinos y vecinas depositarlos de forma gratuita según su tipología, facilitando su tratamiento y valorización posterior.
