¿Han intentado pedir cita previa en el Ayuntamiento de València? No esperen un calendario donde pueden comprobarse los huecos libres y elegir según tu propia disponibilidad. Aunque pudiera parecerlo cuando se accede a la página web, todos los días están rojo y no se puede seleccionar ninguno. Tras varios intentos infructuosos, solo queda intentarlo en el teléfono de atención ciudadana, el 010.

Son apenas las 9 de la mañana y después de los cansinos tres minutos de información sobre protección de datos y música de espera, al pedir cita para una gestión del padrón, me informan de que no quedan. ¿Cómo? ¿No quedan citas? ¿Nunca? Ante mi extrañeza la operadora me explica que se han acabado las que han dado para el día 22 de septiembre, el día que tocaba hoy, 19 de agosto. Le pido por favor que me detalle el inteligente y avanzado sistema de obtención de citas. Resulta que a las 8.30 en punto se pone en negro el único día disponible (de dentro de más de un mes) y en tres minutos vuelve todo al rojo porque se han agotado las citas. Amablemente me aconseja que tenga introducidos mis datos personales en la aplicación con antelación para tener más posibilidades de acceder a la cita y sin querer elegir una sede de las varias disponibles para el trámite. Donde me toque y a la hora que pesque porque está difícil conseguirlo. Se requieren puntualidad, pericia y paciencia.

Este sofisticado ‘protocolo’ no está explicado en ningún sitio en la web, has de llamar por teléfono cuando te canses de entrar en ella y no poder resolver nada. Se lo cuento a un amigo y me dice que, además, ese número al que he llamado no es gratuito. Y no es barato. Eso ya lo veré en la factura el mes que viene porque tampoco lo veo en la web. Al menos he evitado irme a la cola de Periodista Azzati para nada, allí están los afortunados del día que consiguieron número para empadronarse en esta ‘smart city’, modelo de administración electrónica . Teresa Lonja Sánchez. valència.