Enis Bardhi se convirtió el domingo en el héroe granota. En el último suspiro, con disparo cruzado y parando los corazones de los centenares de aficionados desplazados a Montilivi, el macedonio anotaba el tanto que certificaba la permanencia del Levante. El Girona era el rival que lo confirmaba, pero desde mucho antes los esfuerzos habían sido continuos, sustentándose todo ello en cinco pilares básicos que han sido esenciales para quedarse en Primera.
Cinco jornadas clave
El Levante llegó al encuentro frente al Espanyol (J.33) muy tocado tras ocho jornadas sin ganar. El Villarreal, que en aquel momento marcaba el descenso, se encontraba a solo tres puntos y los granotes aún tenían por delante un calendario con Barcelona, Betis o Atlético en su camino. No obstante, los azulgrana no dejaron de creer. Acabaron empatando frente a los periquitos, golearon a Betis y Rayo frente a su público, plantaron cara al Barça en el Camp Nou y certificaron la salvación en Girona.
Retorno de jugadores
Tras una buena primera vuelta, el equipo tuvo momentos no tan brillantes. El fichaje más caro de la historia, el montenegrino Vukcevic, no daba con la tecla. Jason no renovaba y fichaba por el eterno rival -una situación que lo llevaba al banquillo- y Toño pasaba varias semanas en prisión. Mientras, el Levante encadenaba una racha de malos resultados que lo acercaban al abismo. Pero la recuperación llegaría. El gallego y el madrileño -con Vukcevic mejorando también en el medio- entraron de nuevo en los onces iniciales de Paco López . Se cambiaba el sistema y, con ello, volvían a llegar los puntos y las victorias al casillero levantinista.
Eficacia goleadora
Pese a que en ciertos tramos los resultados esperados no llegaban, el Levante mantenía a su favor un gran dato: sus registros anotadores. Tras la goleada frente al Rayo, los de Paco López establecían un nuevo récord histórico de anotación en Primera para el club: 55 goles -57 tras los dos del domingo frente al Girona- conseguidos por 16 jugadores diferentes. Al frente de esta clasificación Róger y Morales, con 12 tantos cada uno, sustentaban a un equipo que, tras el triunfo en Girona, es el cuarto más anotador de Primera División tras Barcelona, Madrid y Sevilla.
Vezo: Regalo de navidad
Sin duda uno de los puntos débiles de los granotes esta campaña ha sido su endeblez defensiva. Solo en la primera vuelta, los azulgrana encajaron 35 goles, una cifra que obligó a buscar un refuerzo que apuntalara la zaga. El elegido para ello fue Rubén Vezo, quinto central en el Valencia, pero una gran apuesta en el Levante. Y ha cumplido con nota. Con él en el campo, los levantinistas han bajado drásticamente sus goles en contra, pasando de casi dos por partido a menos de uno y medio. Los gritos de «Vezo quédate» en Orriols solo confirman su importancia para consolidar la salvación.
Confianza en el técnico
Paco López llegó al banquillo levantinista para salvar al equipo la pasada temporada. Y lo logró. Este año, las cosas parecían, por momentos, mucho más complicadas. Pero la directiva no dudó y confió en su trabajo. Con ello, el de Silla no se rindió y continuó apostando por sus ideas pese a los resultados. Al final, esta nueva salvación da la razón a un entrenador que siempre creyó en lograr el objetivo.
